Las obras en infraestructuras viarias en diferentes calles de la barriada obligó a Emaya a retirar los contenedores situados en las calles Alfonso X El sabio y Juan de Austria. Para compensar la ausencia de baterías de contenedores, se propuso instalar una batería en la calle Infant Pagá. Fue tan solo una mera declaración de intenciones pues desde entonces, y ya han pasado más de 10 meses, los contenedores ni están ni se los espera.
Los vecinos no tienen la menor intención de guardar la basura en sus viviendas por lo que han optado por arrojar las bolsas de desperdicios al suelo, a la calle, en cualquier lugar.
El resultado no puede ser más caótico pues la basura está desperdigada por las calles, con bolsas rotas y desperdicios por doquier. El presidente de la Plataforma Salvem Cam Redó, en declaraciones a mallorcadiario.com, ha señalado que "los vecinos arrojan la basura donde pueden ya que no hay contenedores y esto se ha convertido en un verdadero estercolero".
INFORME DE LA POLICÍA LOCAL
Lo peor de todo, según Blázquez "es que llevamos más de 10 meses aguantando. Tan solo retiran la basura cuando la Policía Local emite un informe que obliga a Emaya a retirar las bolsas de basura; hasta entonces, las calles se llenan de desperdicios".
Blázquez lamenta que el Ayuntamiento de Palma incumpla sistemáticamente sus promesas puesto que "en una reunión que mantuvimos hace ya cuatro meses con técnicos y el presidente de Emaya, Ramón Perpinyá, se nos prometió que repondrían las baterías de contenedores en las calles Juan de Austria y Alfonso X El Sabio, que forman parte de la zona de las viviendas sociales de Camp Redó; desde entonces, nada de nada".
El problema que se genera, según el presidente de esta plataforma vecinal "es que en esta barriada hay numerosas personas mayores, algunas de ellas con problemas de discapacidad, que no pueden acceder a otros contenedores situados en calles alejadas de donde viven y dejan los residuos justo en los puntos donde estaban los contenedores retirados"·.
"Por si esto no fuera suficiente- concluye Víctor Bláquez-, hay solares abandonados como el de Infant Pagà, donde contínuamente se vierten escombros y todo tipo de desechos que son descargados en este barrio por personas que vienen de otras zonas, lo que provoca la proliferación de ratas".