Ayer leía en este fantástico medio, www.mallorcadiario.com, el impecable artículo de mi compañero y amigo Josep María Aguiló, quien siempre encuentra las palabras adecuadas para transmitir la realidad que vivimos, de una manera majestuosa.
Hace unos meses decidí mejorar mi alimentación y me embarqué en realizar un método de alimentación llamado Wildfit.
Unas semanas después, cenando con unos amigos alemanes, me comentaron que ellos hacía años que hacían ese tipo de alimentación y que en la actualidad solo tenía un inconveniente, que era que se había convertido en una dieta “para ricos”.
Todos reímos con el comentario, pero como bien indica mi amigo Aguiló, comer de manera saludable, se ha convertido en un artículo de lujo.
Cada vez que voy al Mercado del Olivar a hacer mi compra bisemanal, me dejo un riñón y medio en la misma y cuando miro mi cesta veo que he comprado, pepinos, apio, aguacates, jengibre, unos tomates, unos cogollos y con suerte algunos plátanos y manzanas y acabo de dejarme un pastizal que, en relación con la cantidad, oscila entre 50 a 75€, ¡una verdadera vergüenza!
Por no contar que la semana pasada, en una cafetería de la zona, por un café solo, sin azúcar ni nada de nada, me cobraron 2,90€.
Y es que, ¡una ya no puede ni cuidar su alimentación!
Al paso que vamos, mirar a la luna llena, nos saldrá más caro que hacerlo a la creciente y no los quiero ni contar si esa luna es azul, como la de esta noche, la cual se designa con ese nombre, por ser la segunda luna llena dentro del mismo mes.
Sin ir más lejos, el otro día una amiga me dijo que le habían cobrado un pastizal por unos plátanos y mirando los precios encontré una reseña que hablaba de que, en agosto de 2022, el kilo de plátanos estaba en el Mercadona a 1,25€/kg y este mes está a 3,25€/Kg.
En cambio, los salarios no han subido ni un céntimo y cuando queremos subir nuestros servicios, a todo el mundo le parece una aberración.
Pero bueno, parece que nuestro país está más interesado en hablar del beso dado por el presidente de la Federación de Fútbol femenino, a una de sus jugadoras que, sobre la subida de la gasolina, cuando casi cuesta 100€ llenar el depósito de un vehículo, o sobre la subida del precio de los plátanos.
Nuestros dirigentes son unos maestros en distraernos sobre lo que realmente es importante en esta vida y así poner nuestro foco en lo que a ellos quieren que lo pongamos.
Así que uno, no puede ya ni intentar cuidar su alimentación y comer productos más ecológicos y saludables, porque nos dejaremos un riñón y medio en esa dieta que, teóricamente nos hará personas más saludables, cosa que tal vez, tampoco interese mucho.
No obstante, este tema es de estos que se hablan en una cafetería con amigos, pero que difícilmente van a más porque los humanos somos así y enseguida olvidamos lo que realmente es importante para nosotros y volvemos a buscar la distracción y el vivir el momento, sin pararnos a pensar, cómo podemos hacer para cambiar y mejorar el mundo en el que vivimos.
Así que, seguiremos sin resistencia alguna, buscando la manera de llegar a final de mes, de una forma digna, para seguir complaciendo a nuestros dirigentes que nos manipulan día tras día y hacen que nuestra vida sea un poco más complicada todavía y que, de un derecho que deberíamos tener por justicia Divina, se haga un lujo.
