Vox presenta el jueves en el Pleno del Ayuntamiento de Palma una proposición con el objetivo de que el equipo de gobierno active los procedimientos para limpiar el torrente de Sa Riera, especialmente en el tramo comprendido entre el cruce con la carretera de Puigpunyent a la salida de Establiments y la zona conocida como El Hoyo. Se trata de un asentamiento ilegal en el que se cree que pueden vivir hasta 600 personas expuestas al riesgo de una torrentada.
El torrente de Sa Riera está catalogado como “zona potencialmente vulnerable a la inundación”. “Pedimos al alcalde de Palma, José Hila, que haga todo lo que esté en su mano para evitar una desgracia. El torrente necesita una limpieza, especialmente en la zona de El Hoyo. Si el Ayuntamiento de Palma no lo puede hacer, que pongan todo su empeño en exigírselo al Gobierno balear. Si el Gobierno de Francina Armengol no actúa, el señor Hila debe proceder a la limpieza del torrente de manera subsidiaria. Cuando el torrente se desborde y haya muertos sobre la mesa no importará qué institución es la culpable porque todas serán las responsables por haber mirado hacia otro lado” ha dicho la concejal de Vox en el Ayuntamiento de Palma, Sandra Barceló.
La zona de casas ilegales de El Hoyo se encuentra cerca del torrente de Sa Riera, en un punto angosto, con un puente y en el que la vegetación ha crecido salvaje desde años. Buena parte de las casas han sido construidas sobre la cuenca natural del torrente, a una cota baja y sin ningún tipo de barrera que pueda frenar el avance de las aguas. La situación se agrava con la acumulación de residuos y basura de todo tipo y con el hecho de que en la orilla opuesta el terreno se eleva, por lo que la única evacuación posible del agua pasa por inundar El Hoyo. Muestra del peligro real que se cierne sobre el Hoyo es la tormenta de octubre de 2007, cuando cayeron 25 litros por metro cuadrado en diez minutos. Una mujer danesa falleció al ser arrollado su coche por las aguas cerca de la urbanización de Son Serralta (Puigpunyent). Horas más tarde, por la noche, la crecida de Sa Riera inundó el Hoyo, que fue parcialmente desalojado. “Con estos antecedentes y con toda la información que el Ayuntamiento de Palma y el resto de instituciones tienen en sus manos sobre la peligrosidad de la falta de limpieza llama la atención la inacción, el pasotismo. ¿Tan poco le importa a Hila y a sus compañeros de partido en el Gobierno balear la vida de las personas? ¿Si un día se inunda El Hoyo y hay muertes tendrá la conciencia tranquila? Algunos no han aprendido nada de la catástrofe de Sant Llorenç des Cardassar pero todavía están a tiempo de evitar males mayores” ha asegurado Barceló.
El portavoz de Vox en el Consell de Mallorca, Pedro Bestard, ha asegurado que el problema de la falta de limpieza no es nuevo ni en Palma ni en la Part Forana. “Lo más grave es que parece que no todo el mundo es consciente de que puede haber una torrentada en cualquier momento. Lo sucedido en Sant Llorenç des Cardassar debería servir para tomar conciencia y ser más precavidos porque la vida de la gente está en peligro” afirma Bestard.
Desde Vox se ha calculado el impacto que sobre el torrente de Sa Riera tendría una tormenta similar a la del Llevant de Mallorca que en octubre de 2018 causó 13 víctimas mortales y cuantiosos daños materiales. Dicho cálculo ha sido avalado por un hidrógrafo independiente. En Sant Llorenç cayeron 220 litros por metro cuadrado en cuatro horas. La extrapolación de dicha precipitación a la cuenca natural del torrente de Sa Riera (58 kilómetros cuadrados) supondría 1.276 millones de litros de agua, 1,27 millones de metros cúbicos. Con un cauce sucio la desgracia está asegurada.
“El Ayuntamiento de Palma, el Consell de Mallorca y el Gobierno balear deberían tener en cuenta que es propio del clima mediterráneo, entre finales de verano y el otoño, el fenómeno de lluvias torrenciales concentradas geográficamente en áreas localizadas y en un breve periodo de tiempo. Eso quiere decir que se debe de trabajar de manera conjunta para evitar que, las lluvias que vengan en los próximos meses, causen daños imposibles de reparar” sostiene Bestard.