El Ayuntamiento de Palma ha prorrogado hasta septiembre el permiso para que bares y restaurantes puedan ocupar con mesas y sillas las plazas de aparcamiento en la calle que se encuentren delante del local. La medida, aprobada cuando se acordó el cierre de los interiores, tenía vigencia hasta el próximo lunes 3 de mayo. Es decir, sólo quedaba una semana para que concluyera el actual permiso y no eran pocas las dudas mostradas por el sector ante la posibilidad de que Cort optase por no prolongar la autorización, con riesgo cierto de incurrir en pérdidas todos aquellos que han destinado inversiones y recursos para habilitar pequeñas terrazas delante del local.
Finalmente, Cort ha adoptado la postura más lógica, por mucho que este mismo lunes también se hayan reabierto los interiores de bares y restaurantes, aunque, de momento, sea con una limitación de aforo. Todo ayuda a que uno de los sectores más afectados por las restricciones vaya incrementando su actividad, lo que resulta especialmente señalado en puertas de una temporada que pretende recuperar buena parte de las llegadas de turistas perdidas durante la pandemia.
Cort volverá a revisar la medida en septiembre, evaluando el desarrollo de la misma durante estos meses de verano y analizando la evolución de los datos -sanitarios y económicos- hasta esa fecha.
El Ayuntamiento de la capital ya había acordado eximir a estos negocios del pago de la tasa de ocupación de la vía pública durante todo el 2021, ampliando lo inicialmente acordado para el primero trimestre. Ahora, complementa la ayuda a bares y restaurantes con la extensión del permiso para ocupar plazas de aparcamiento. No todos los locales podrán beneficiarse de la medida, ya que muchos no tienen posibilidad física de ocupar plazas de aparcamiento delante del establecimiento; pero la medida supone un respiro para buena parte del sector que gana, además, un escenario estable hasta final de septiembre.
La medida llega el mismo día en que empieza una nueva fase de la desescalada, con el retraso del toque de queda, la ampliación del número de personas en los encuentros sociales, aumento de aforos de comercios o la citada apertura de interiores de bares y restaurantes, entre otras medidas. Con ello, las próximas semanas prometen de aumento de la actividad, lo que debe redundar en una reactivación de un tejido económico y social que ya lleva demasiados meses al ralentí.