Los tiempos cambian, y con ellos las costumbres. Algunas de ellas mejoran con el paso de los años, pero las hay que parece que más que avanzar, nos hacen retroceder.
Siete miembros de una familia juntos en la misma habitación, y todos ellos aislados en su mundo tecnológico. No hay interacción directa. Tal vez se están comunicando de forma online.