Un tribunal del jurado juzgará a partir del lunes a Emerson M.H., acusado del homicidio de un hombre de 26 años que murió tras ser degollado en una pelea en la avenida Joan Miró, ocurrida en la madrugada de la Navidad de 2015, para quien la Fiscalía pide una condena de 12 años. El suceso que se juzgará en la Audiencia de Palma ocurrió tras una discusión en la que participaron varias personas en el interior de una discoteca situada en dicha avenida de la ciudad, en la madrugada del 25 de diciembre del año pasado, donde la hijastra del acusado sufrió tocamientos, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía.
Los vigilantes de seguridad de la discoteca sacaron del establecimiento a varias personas que habían iniciado el incidente, entre los que figuraban la víctima, su hermana y su novia.
Casi una hora después del incidente, comenzó una nueva discusión en las escaleras que comunican la discoteca con la avenida Joan Miró.
Según la Fiscalía, después de que la víctima intentara romper una botella de cristal contra los escalones sin éxito, el acusado sí que logró romper otra botella y "con intención de matar", se dirigió hacia el otro hombre y se la clavó en el cuello.
La agresión le seccionó la yugular y la carótida, lo que le provocó la muerte casi inmediata.
Tres días después, pasadas las 0.20 horas del 28 de diciembre, el acusado, de nacionalidad colombiana al igual que la víctima, se presentó voluntariamente en la Comisaría de Manacor y manifestó que había participado en la reyerta ocurrida en Navidad, si bien dijo no recordar los hechos.
La violenta agresión la grabó en vídeo un testigo, y las imágenes se difundieron por redes sociales.
La Fiscalía pide que el acusado sea condenado a 12 años de prisión y se le prohíba comunicarse ni acercarse a menos de 300 metros de la novia, la hermana y la madre del fallecido. También pide que indemnice con 50.000 euros a los herederos de la víctima
