Este sábado, leía en nuestro querido Mallorca Diario que casi un 33 por ciento de los trabajadores pasarán a trabajar desde casa, con relación al escaso 8 por ciento que lo hacía antes del confinamiento, lo que hace que el teletrabajo sea ya una realidad imperante en nuestra sociedad.
Son muchas las dudas que me surgen al respecto. ¿Estamos preparados como sociedad para este cambio tan drástico?
Es cierto que muchas empresas han sido conscientes del ahorro de costes y de tiempo que significa mantener a los trabajadores en casa, pero no todo el mundo tiene ni la formación, ni la situación, ni las habilidades para poder realizarlo.
El teletrabajo exige tener un entorno en el hogar exclusivo para ello, esto es, una habitación a modo de despacho, no tener niños en casa, y ser una persona estructurada, organizada y con una fantástica gestión del tiempo.
Levantarse cada mañana, arreglarse y vestirse como si fueras a salir de casa, mantener una imagen intachable, sobre todo si vas a realizar videoconferencias durante el día, hacer los descansos pertinentes en la jornada, y medir muy bien los tiempos.
Pero, sobre todo, nos va a exigir tener una gran disciplina y ser muy riguroso en nuestras formas.
Es cierto que si somos capaces de desarrollar todas estas herramientas, posiblemente el teletrabajo puede ser una gran realidad para nosotros y puede facilitarnos la vida, pero ¿de cuántos trabajadores con estas habilidades disponemos en nuestras empresas?
No sirve irse a hacer las compras en horario laboral, ni pasarse el día hablando con mi amiga Pepa.
Será fundamental esa estructura, planificación y estrategia para poder desempeñar nuestras funciones con éxito.
Es cierto que no todas las profesiones nos podrán permitir realizar nuestras funciones desde casa; no obstante, es muy cierto que muchas funciones burocráticas, profesionales o comerciales, que en parte puedan desempeñar sus funciones administrativas en casa, podrán tender a este modelo, ya que ¿para qué nos sirve el tener un equipo comercial en la oficina si donde deben estar es en la calle comercializando sus productos?
Desde mi punto de vista, el teletrabajo ha llegado para quedarse, siempre y cuando nuestra sociedad acepte realmente el cambio y sea consciente de que este modelo de trabajo no consiste en unas pequeñas vacaciones domésticas, sino que debe de convertirse en una manera de trabajar de forma rentable para ambas partes.
¿Te ves tú con las suficientes habilidades y destrezas para poder desarrollarlo?
Si es así, estás de enhorabuena, ya que, posiblemente, te cambiará la vida y la forma de desenvolverte en ella, mejorando sustancialmente tu conciliación familiar y las relaciones con el medio que ahora nos va a tocar vivir.
Te aseguro que si eres uno de estos privilegiados estarás creando un nuevo escenario para nuestra nueva realidad tras la Covid-19.
Te invito a probar si en tu caso es viable; no obstante, no te engañes, o, pasado este periodo, estarás deseando volver a la ya utópica anterior realidad.
En mi caso funciona. ¿Y en el tuyo?