Fue como una gran semifinal entre David y Goliat, donde hubo un poco de todo, incluso, sonrisas y lágrimas – !ji ji ja ja! jo! Buaaah o Snif!-, a decir del ayudante de cámara de Roca i Junyent, Señor Silva el sempiterno sonriente. La jornada se inició con sonrisa y un saludo de pocos segundos- el respetable estaba a mucha distancia de la rampa y no pudieron responder como es debido. La Infanta, llegó, se apeó sonriente !ji ji ja ja!- acompañado del Sr. Roca y recibida por Jesús, Don Jesús Silva, el pregonero del amor y la confianza que siempre tuvo, tiene y tendrá la Infanta con el Duque. Larga declaración con sonrisas – !ji ji ja ja !- y lágrimas -! buaaaah o snif! El padre, presente en todo momento en la sala, la miraba desde arriba, enmarcado en una fotografía que pende sobre la cabeza del Juez Castro. Por fin se producía el encuentro. Se parecía al partido de ida de una gran final como la de la Copa del Rey de balonmano digo de fútbol – !ji ji ja ja! Pasan las horas y llega el entreacto. Los abogados Roca y Silva manifiestan a la prensa que la cosa pinta bien. Tras finalizar el tiempo reglamentario y jugarse algunos minutos de descuento, por aquello del tiempo perdido, para secarse lágrimas y demás fluidos producidos por las emociones de algunas entradas fuertes, se pita el final y la cosa queda visto para sentencia y a cara de perro, para lo que será el partido de vuelta, si es que no lo suspende el tribunal único de competición. El Marcador final indica que hay un gol en el casillero. Lo ha metido la Infanta -! ji ji ja ja! Ha sido de un fuerte disparo directo, que ha mandado al guardameta Iñaki al fondo de las mallas. Así las cosas, parece que de momento, la primera ha dado en la frente de Iñaki -¡Buaaah snif!- . Veremos por donde salen los demás tiros. Habrá que esperar pues, al partido de vuelta o lo que puede ser la Gran Final. En caso de empatar -hay pocas probabilidades-, habrá que pasar al lanzamiento de la tanda de penaltis. llegado el caso no hay que dudar que la Infanta dispone de los mejores tiradores. En la improvisada sala de prensa, se produce la valoración de los entrenadores cuidadores y escuderos personales de la Infanta. No habrá lugar a partido de vuelta, no es necesario “La declaración de la Infanta ha sido muy sincera, muy leal, muy ejemplar”- !ji-ji ja ja! . “Y se demuestra cuán inocente es la Infanta de todas las imputaciones “.-!Ji ji ja ja! “No lo sé, no lo recuerdo, no me consta, de eso no me ocupaba yo, mi padre que me tiene mucho cariño me los prestó” -lágrimas emociones regias !Buaaaah, snif! La infanta, nunca supo nada. Si firmó algo, fue porque se fiaba del Duque, fue por amor. La Infanta amaba a Iñaki. Silva Don Jesús, Salvaguarda Nacional de las buenas costumbres, de la obediencia debida de la mujer para con su marido. Este hombre -Silva-al que seguramente su eminencia el Arzobispo de Granada Francisco Javier, no dudaría en encomendar el prólogo de una próxima edición del libro “Cásate y se sumisa” o el Director de la película un “Hombre y una Mujer” la banda sonora, fue, junto a su jefe el Señor Roca, quien casi siempre habla y ríe con los ojos como pegados, quienes para concluir, dijeron con los ojos casi cerrados y muy sonrientes: “ La Sonrisa de la Infanta son suficientes y explican por si mismos como se ha desarrollado la comparecencia. !Ji ji ja ja! Qué emoción !Buhaa Snif! .Mientras, Castro se fugaba del lugar en moto, a todo gas, entre sonrisas y lágrimas, supongo.
