La visita de un viceprimer ministro chino a Palma ha provocado un gran atasco en la autopista Palma-Andratx, poco después de este mediodía, ya que a la altura de Palmanova los automovilistas se han visto obligados a reducir la velocidad, quedando el tráfico cortado en Cala Major, con el fin de dar paso al mandatario y a su séquito. El gran despliegue de medios policiales, tanto de la Policía Nacional como de la Guardia Civil, incluido un helicóptero y una ambulancia, así como el hecho de que los semáforos hayan dejado de funcionar, ha sorprendido a los conductores que se han visto atrapados en la zona, dado que la espectacularidad de la medida ha hecho pensar a más de uno en un posible siniestro, especialmente a los que se han visto sorprendidos en Palmanova, muchos de los cuales han recordado el atentado de ETA en 2009. De hecho, muchos conductores han dado la voz de alerta, llamando a los medios y preguntando si sabían que había sucedido, ya que el despliegue era completamente inusual en una Isla acostumbrada a las medidas de seguridad, por la presencia de la Familia Real. En cualquier caso, el atasco se ha solucionado en pocos minutos, una vez que ha pasado la caravana del dirigente chino, cuya identidad, por propia decisión del Gobierno de su país, se ha tratado de mantener en secreto, tal y como han informado desde la Delegación del Gobierno de Baleares, resaltando que estas medidas se toman a petición de los interesados, quienes solicitan una escolta a las autoridades pertinentes. Sin embargo, según ha podido averiguar este digital, el dirigente chino es uno de los cuatro viceprimer ministros con los que cuenta el Gobierno de China. El político está alojado en el hotel Valparaíso de la Bonanova, donde suelen acudir los mandatarios de ese país. En su estancia en Mallorca el dirigente ha visitado Valldemossa por petición expresa, un lugar que ya conocía de una anterior visita, así como el castillo de Bellver. El político tiene prevista su marcha de la Isla este miércoles.
