Bajo el argumento de que la ley no obliga a llevar desfibriladores dentro de los barcos, la compañía Balearia elude responsabilidades por la muerte de un pasajero en la ruta Ciutadella, Alcúdia, Barcelona el pasado viernes debido a un infarto.
En el momento en que el afectado se encontró indispuesto, y al no contar en el interior del buque con un médico ni con un desfibrilador, la tripulación optó por llamar a Salvamento Marítimo para evacuar al enfermo en helicóptero. La súbita muerte del pasajero hizo innecesaria tal evacuación.
Familiares y amigos del finado protestaron por esta falta de medios del ferry Martín i Soler, a lo que la compañía ha contestado que dispone de botiquín y que la tripulación está entrenada para casos de primeros auxilios y emergencias.