El Ayuntamiento de Palma impedirá, con carácter preventivo, la formación de concentraciones entre las 22.00 y las 8.00 horas en la zona central del Paseo Marítimo a fin de evitar el deterioro de la tranquilidad del entorno, que se den situaciones denigrantes para quienes paseen por este lugar y que se dificulte la utilización normal del espacio público, circunstancias principalmente debidas al fenómeno del botellón. Así lo ha acordado la Junta de Gobierno con la declaración de la Avenida Gabriel Roca como situación de especial intervención, amparándose para ello en el artículo 11 de la Ordenanza reguladora del uso cívico de los espacios cívicos, aprobada por el pleno del Consistorio el pasado mes de febrero. La medida adoptada va avalada por un informe policial que aseveraba que se estaba produciendo una reiterada infracción de conducta en esta zona -entre el Auditorium y la zona de estacionamiento del antiguo edificio Spantax-. Tal y como ha explicado en rueda de prensa la coordinadora general de Educación, Igualdad y Derechos Cívicos, Elena Quintana, las multas que podrán imponerse en caso de que la población continúe concentrándose oscilarán entre 750 y 1.500 euros, aunque ha aseverado que "no es prohibir por prohibir" sino que "se aplicará el sentido común" al aplicarse la normativa "en caso de que generen molestias y prejuicios, sean 10 ó 40 personas". Es más, la regidora de esta área, Cristina Ferrer, ha precisado que antes de que la Policía Local intervenga de forma estricta para dispersar a los grupos, la zona comenzará estos días a señalizarse mientras que durante tres semanas se informará a los ciudadanos sobre la nueva medida. En relación a los extremos del Paseo, será la Policía Portuaria la que aplique su propio reglamento de funcionamiento. El informe policial que ha dado pie a la inclusión de la zona central del Paseo como situación de especial intervención revela que la afluencia media de personas que se ha producido es de 700 a 800, llegándose a observar picos máximos de 1.200 personas. Además, durante 2010 se interpusieron 129 denuncias al amparo de la Ordenanza Municipal de Limpieza por "escupir, defecar o miccionar en la vía pública", cifra que este año se sitúa en 28 denuncias. LA AFLUENCIA DE PERSONAS SE HA REDUCIDO EN UN 50 POR CIENTO En cualquier caso, Ferrer ha destacado que con la aprobación de la Ordenanza del uso cívico, el número de personas concentradas en el Paseo se ha reducido en un 50 por ciento -de 600 a unas 250-, mientras que la presencia de menores de 16 años es indetectable y de 18 también ha disminuido, por lo que el grueso de los participantes se halla entre los 18 y los 24 años. La Unidad Nocturna de la Comisaría de Seguridad y Tráfico aseveraba que reiteradamente se producía una alteración de la tranquilidad de la zona, provocándose situaciones de insalubridad e impidiendo el uso del espacio público así como la libre circulación de las personas.
