El delegado del Gobierno aduce que él no tiene que comparecer ante el Parlament para dar explicaciones por lo que ha sucedido en Son Gotleu. ¿Tiene derecho a negarse? Podríamos hacer dos interpretaciones sobre las funciones del Parlament: si lo consideramos lo que no es, la representación única y soberana de Baleares, tendría todo el derecho a exigir explicaciones; si lo consideramos una representación incardinada dentro de un sistema parlamentario más complejo, no tiene sentido, porque el delegado en todo caso debería ser cuestionado por las Cortes Generales, que también representan a las Baleares. El Parlament debe limitarse -y con ello tiene suficiente trabajo- a lo que son competencias propias de las Islas, entre las que no están las de la Delegación del Gobierno. Por lo tanto, parece que Socías tiene razón cuando se niega a acudir a dar explicaciones a un Parlament que, no lo olvidemos, en realidad está haciendo un poco de circo con este tema. El que, en cambio, yerra (por puro interés propio, claro) es Carles Manera. El Parlament parece tener derecho a preguntar al exconseller de Hacienda que explique cómo es posible que hayamos llegado a esta crisis tan profunda, cómo es que su proverbial visión keynesiana falló de forma tan estrepitosa. Sin embargo, Manera, que carente de todo pudor sí explica su visión en los periódicos, se estaría negando a acudir. ¿Entonces, no tiene que comparecer nunca ante nadie?
