No hay peor sordo que el que no quiere oír y no hay peor ciego que el que no quiere ver, dice el refrán.
Mariano Rajoy además de corrupto actúa como un autista, El Comité Ejecutivo Nacional del PP convocado el pasado día 25 para analizar los resultados de las elecciones autonómicas y municipales concluyó sin que el presidente del partido, Mariano Rajoy, haya dado una respuesta a la debacle que ha sufrido su partido en las elecciones autonómicas y municipales del día anterior.
Defendió al miércoles siguiente en sede parlamentaria que, pese a los resultados cosechados por el PP en las elecciones del pasado domingo, su Ejecutivo sigue siendo “legítimo” y “democrático” porque en 2011 recibió el respaldo de 11 millones de votos y dejó claro que va a seguir adelante con su política económica porque está dando resultados y se siguen precisando reformas.
Ni cambios ni soluciones, y varios barones populares coincidieron en asegurar que “no ha sido autocrítico en su análisis”. En la reunión los barones que han perdido la silla de sus respectivos gobiernos abrieron la boca esta vez, para reprocharle a su presidente la falta de autocrítica y la falta de respuesta. Rajoy se limitó a destacar que el PP ha sido” la primera fuerza de España en porcentaje de votos, en número de concejales y en mayorías tanto absolutas como relativas”, ¡vamos un éxito en toda regla!, sin mencionar, ni por asomo, la pérdida de 2,5 millones de votos a lo largo del estado, en relación a las última elecciones autonómicas y municipales.
La estancia de los barones del PP en el Comité Ejecutivo se convirtió en un largo lamento y crujir de dientes porque las elecciones autonómicas y municipales han resultado mucho peor de lo esperado y han supuesto una verdadera previa de las generales, como lo fue anteriormente las europeas del año 2014.
Prácticamente ninguno de los seis presidentes de autonomías que no podrán volver a gobernar niegan las consecuencias que han tenido en sus territorios la acción del Gobierno (las reformas) y del partido (la respuesta a la corrupción), sin olvidar sus propios errores de gestión.
Estos mismos barones, entre ellos Luisa Fernanda Rudi de Aragón, la presidenta del PP vasco Arantza Quiroga, José Ramón Bauza, Alberto Fabra o Alberto Núñez Feijóo han admitido que los populares tienen que “seguir mirando a la gente” y “entender mejor” lo que les pide la ciudadanía, y en consecuencia, hay que “acertar más” en las políticas y los mensajes, y que no se pueden conformar diciendo que ha sido el partido más votado y han subrayado que ya hubo un aviso en las elecciones europeas del año pasado. Y avanzando, muchos de ellos, que piensan dimitir de sus obligaciones en el partido y en las instituciones para dejar paso a savia nueva, a gente nueva que no esté manchada por la corrupción rampante en el Partido Popular, asumiendo de esta forma su parte alícuota de responsabilidad en el derrumbe del partido.
Pedro Sanz de La Rioja y Alicia Sánchez Camacho de Cataluña se han convertido en los únicos barones del PP que han salido a respaldar públicamente a Mariano Rajoy tras el batacazo del partido en las elecciones municipales y autonómicas del pasado 24 de mayo, llegando a decir que “Rajoy es el mejor y va a ser el candidato”.
Además se les ha sumado el pelota y vocero oficial del PP, el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, defendió que Mariano Rajoy es el “único” y “mejor” candidato del PP, además de “fuerte y solvente”, y ha defendido la candidatura de Rajoy para las elecciones generales porque cree que es el mejor candidato, que tiene un “compromiso” con todos españoles y que lo va a cumplir. Debe ser un compromiso de llevarnos a todos al paro, de arruinarnos la vida, de destrozar y acabar con la sanidad pública, de elevar la deuda pública hasta límites insoportables, de arruinar al pequeño comercio, de laminar nuestra calidad de vida y de seguir gobernando para que los banqueros y las grandes empresas sigan aumentando sus beneficios a costa del sufrimiento de las clases medias y bajas españolas que son las que están pagando esta crisis.
El aún presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, ha recomendado a Mariano Rajoy “mirarse al espejo” antes de volver a presentarse.
El problema de que no reconozca sus errores, sus corruptelas, su manifiesta incompetencia y no desaparezca de la vida pública y política española haciendo un mutis por el foro ya, inmediatamente, es que el período de tiempo que falta para que convoque elecciones generales puede terminar de hundir la economía del País y la de todos los españoles de a pie.
Olga María Henao, ex novia de José Antonio Monago, lo tenía claro cuando dijo, al conocer los resultados de su ex novio: «A todo cerdo le llega su San Martín»
