Se enteró que ella era la novia justo al entrar a la iglesia.
Cuando Mercedes Ortiz llegó a la puerta de la iglesia, descubrió que no era una invitada más de la boda. Su marido, Gustavo logró organizar la boda en Buenos Aires (Argentina), sin que sospechase nada.
Fue con ayuda de sus amigos con los que consiguió que todo saliese como quería. De hecho, uno de ellos fue el encargado de grabar la reacción de la mujer cuando la abrieron las puertas de la iglesia, según publica mirror.co.uk.