El Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany ha aprobado por unanimidad una modificación de la ordenanza de Convivencia que permitirá a la Policía Local ofrecer una mejor respuesta ante situaciones que se presentan con frecuencia en el municipio y que tienen relación con el consumo de alcohol, como son los botellones.
Según ha informado el Consistorio, la modificación se aprobó inicialmente en el pleno de abril y no ha recibido alegaciones durante su exposición pública.
En relación a los botellones, la ordenanza modificada mantiene prohibir el consumo de bebidas, tanto alcohólicas como no, cuando el consumo pueda realizarse en situaciones que puedan perturbar el entorno, provocar aglomeraciones o generar insalubridad.
El precepto, según han dicho, se amplía ahora a situaciones como las aglomeraciones de gente que se registran en zonas de ocio nocturno, provocando molestias a los vecinos.
La ordenanza recoge la obligación de los locales donde se consumen bebidas de impedir que sus clientes salgan a la calle con ellas, excepto en terrazas y espacios autorizados. Asimismo, se introducen algunas cuestiones relacionadas con menores y que están incluidas en el Plan Municipal de Drogas.
Así, señala también la responsabilidad directa de los tutores legales en las infracciones cometidas en relación al consumo de bebidas alcohólicas y autoriza a los agentes la intervención a los menores de las bolsas que lleven en la calle con las bebidas.
