Importantes novedades las que anuncian desde la organización de la Copa del Rey Audi Mapfre de vela para la edición de este año.
Una edición que será presentada oficialmente de aquí a unas horas en las terrazas del Real Club Náutico de Palma y que alcanza su trigésimo primera edición. Cabe recordar que este año se han cambiado las fechas habituales para no coincidir con las Olimpiadas de Londres.
La primera edición de este trofeo, cita obligada del calendario internacional de regatas, tuvo lugar en 1982 y fue organizada por la Asociación Nacional de Cruceros. En ella participaron algo más de medio centenar de embarcaciones pero fue el italiano “Nat” el que tuvo el honor de inscribir su nombre como primer ganador de la Copa.
En 1983, el “Barracuda” de Pepín González fue el vencedor mientras que uno de los míticos de esta competición, el “Bribón” de José Cusí, lo hizo en 1984 y 1985.
Fue en ese último año, 1985, cuando se introdujo la clasificación por divisiones y para 1987 el número de participantes superaba el centenar hasta alcanzar los 106.
Entre 1991 y 1995, armadores, patrones y tripulantes españoles coparon los podios de la competición. Fue el momento de los Doreste (Josele y Noluco), José Luis Suevos, Pedro Campos o Jaime Yllera y años en los que este trofeo, que desde 1989 introdujo el sistema IMS, comenzaba a tener cada vez más, un mayor peso a nivel internacional.
Así, en las ediciones de 1992 y 1994 se volvió a superar el número de 100 participantes. Por cierto, que el “Bribón”, de don Juan Carlos, se impuso en sendas ocasiones en ese breve lapsus de tiempo: en el 93 y en el 94.
En 1998, con un total de 127 participantes, la Copa del Rey es catalogada ya como la mejor regata del mundo y es a partir de esta edición cuando se consolida definitivamente el sistema IMS Regata y Crucero, divididos según eslora. El “Cutty Sark” de Pelayo de la Mata se impone en las ediciones de 1996 y 1997; el “Zurich” de Manuel Chirivella lo hace en 1999 y el “Fadesa” de José Manuel Cardesín, en el año 2000.
Mención especial cabe hacer del “Caixa Galícia” que logró un hito que no ha sido repetido hasta el momento por ninguna otra embarcación: imponerse durante tres años consecutivos, desde 2003 hasta 2005.
La Copa del Rey comienza entonces a nutrirse también de numerosos regatistas de la Copa América que llegan a la isla para participar a bordo de embarcaciones tanto nacionales como internacionales, enriqueciendo aún más la experiencia y la competición.
El CAM del Príncipe de Asturias se impuso en 2005 y en ese año se inicia la participación de la clase TP-52, categoría en la que “El Desafío” marcará un hito al imponerse en 2008 en esta categoría y en la GP 42.
La Copa del Rey tampoco ha sido ajena a la crisis que vio reducidos sus premios de siete, en 2009, a los cinco en 2010 pero el número de participantes se ha mantenido siempre alto. De hecho, la propia organización habla de "una línea ascendente" que se consolida cona la introducción de nuevas clases y formatos en la última edición celebrada.