Ustedes, por fortuna, no estarán al tanto de lo que, tras más de un mes de vacaciones navideñas (que podrían haber enlazado con el verano, por el bien de todos), ayer los diputados de nuestras islas en el Parlament autonómico reanudaron los debates. Pero si lo supieran, no estarían contentos.
Por un lado, la portavoz socialista, Francina Armengol, acusó al Gobierno conservador de ser responsable de cada uno de los parados que se han creado en las islas desde que llegó al Gobierno. Obviamente, la acusación es insostenible en términos de sentido común. Estamos en un contexto de hundimiento que donde sea, como sea, hará que el 2012 vaya a ser peor que el 2011, porque los fundamentos productivos de nuestra economía se han desmoronado. Eso, que es culpa de todos por la gestión de los últimos diez años, como mínimo, no se arregla en un instante, por lo que la acusación es propia de un patio de colegio.
Pero la respuesta no es más brillante: Bauzà contestó que “con un poco de tiempo” resolverá el problema. Naturalmente, a estas alturas, nadie se puede creer que nuestro Gobierno, que ha sido incapaz de presentar un plan económico y que, como su antecesor, sólo parece capaz de ir capeando el temporal día a día, va a resolver las cosas si tiene tiempo.
O sea, como ven, estaban mejor sin saber de qué fue el Parlament, porque en resumen, seguimos viendo un espectáculo carente del menor nivel.