Aunque Viviana de Sans se esforzó en sonreír y en resaltar que habían consolidado su espacio político como “primera fuerza de progreso” (olvidando que concurrían en coalición y que tenía junto a ella al líder de una de las fuerzas coaligadas, Artur Parrón) y feliz por haber conseguido un senador que en diciembre no lograron, la vicepresidenta del Consell d’Eivissa no pudo ocultar la decepción sufrida.
“Las cosas son como son, nadie nos dijo que fuera a ser fácil, es un camino largo y vamos poco a poco porque vamos muy lejos y tenemos mucho por hacer. De aquí en adelante solo nos queda crecer”, declaró De Sans esforzándose por animar a los simpatizantes e interventores y apoderados que acudieron a su sede durante la noche electoral que vieron como sus expectativas de adelantar al PSOE a nivel nacional se desvanecían.
Artur Parrón, líder de Esquerra Unida, se mostró abatido “en una noche que no es fácil”, confesó. “No son los resultados que todos deseábamos ni esperábamos y por tanto son malos resultados y hay que reconocerlo. No hemos sabido movilizar la que creemos es una mayoría que quiere el cambio. Tendremos que seguir trabajando para movilizar esta mayoría social que sabemos que existe”, lamentó Parrón.
También criticó que ha calado el discurso del miedo: “un discurso del miedo basado en argumentos falaces e inciertos, que lamentablemente ha calado mucho y ha afectado al resultado”.
Tuvo tiempo de lanzar reproches al PSOE: “estamos ante un escenario difícil y complicado que pudo haber sido diferente si el PSOE hubiese optado por formar un gobierno moderadamente de izquierdas. Esta negativa ha traído la victoria del PP y un escenario de un muy probable nuevo gobierno Rajoy”, espetó.
Mario Devis, el candidato al Senado que por segunda vez se queda en segunda posición, reconoció que esperaban unos resultados mejores, "pero hay que reconocer que tampoco han ido tan mal", manifestó buscando el lado positivo de haber quedado segunda fuerza en Balears.