La Patronal del Pequeño y medio Comercio, Pimeco, ha pedido al Govern un calendario que permita saber a los pequeños comerciantes como está previsto llevar a cabo la reapertura escalonada de los negocios y un protocolo que los permita aprovechar estas semanas de cierre para irse preparando e implantando las medidas de seguridad necesarias por cuando puedan abrir. Pimeco se suma así a la reivindicación que la Confederación Española de Comercio (CEC) ha hecho este miércoles al Gobierno español.
El sector del comercio es uno de los más afectados a nivel económico por la pandemia del Covid 19. Sin embargo, “nos sentimos desorientados y abandonados por el gobierno”, manifiesta el presidente de Pimeco, Toni Fuster.
Fuster explica que “hace casi un mes y medio que la mayoría de pequeños comercios, excepto los considerados esenciales, estamos cerrados y tenemos la actividad parada debido al coronavirus. No puede ser que todavía no sepamos, ni de manera aproximada, cuando podremos abrir las puertas de nuevo. Tendríamos que tener un protocolo para poder aprovechar estas semanas de cierre para prepararnos cara a la reapertura de nuestros negocios”. Fuster añade que “vivimos una situación de angustia e incertidumbre porque no sabemos ni cuando podremos abrir ni qué medidas tendremos que aplicar cuando lo podamos hacer: si tendremos que comprar protección por las manos y pies de los clientes, como tendremos que garantizar la seguridad a los trabajadores, si tendremos que ofrecer mascarillas, etc".
Toni Fuster también recuerda que “en otros países, ya se ha establecido qué modelo se seguirá, priorizando en mucho casos que puedan abrir primero los establecimientos de menos de 400 m² y progresivamente los comercios de más superficie.”
Pimeco se ha mostrado muy preocupado por lo que pasará con los pequeños comercios y comerciantes después del estado de alarma. Por eso, la patronal hace un llamamiento a la solidaridad de los consumidores y ha puesto en marcha la campaña “Ahora más que nunca TÚ TIENES LA CLAVE”. Esta campaña tiene como objetivo concienciar a los consumidores de la importancia de comprar en el pequeño comercio para que éste pueda abrir las puertas y ayudar así a mantener la idiosincrasia de los barrios, pueblos y ciudades.