Los acusados han reconocido los hechos en una vista previa celebrada esta mañana en la Audiencia Provincial de Baleares, en la que sus defensas han llegado a un acuerdo con las acusaciones.
Los acusados, un hombre italiano y una mujer búlgara, indemnizarán a la víctima con 4.000 euros cada uno. De este modo, con el acuerdo de conformidad han rebajado sensiblemente la indemnización que pedía la Fiscalía, de 16.500 euros -correspondientes al 50 por ciento del total facturado en el local de la víctima con esta maniobra-. Además, inicialmente el Ministerio Público pedía cuatro años de cárcel para ambos.
Además, se ha acordado la suspensión de la pena durante tres años, condicionada al pago de la responsabilidad civil y a que los acusados no vuelvan a delinquir en ese plazo.
Los acusados regentaban sendos bares en Punta Ballena (Magaluf) y trasladaron sus TPV al local de la víctima, donde realizaron los cobros a los clientes con dichas terminales durante al menos un mes -entre septiembre y octubre de 2013-.