No me voy a remontar a mucho tiempo, en realidad sólo a la semana pasada, estoy metido en uno de los múltipes atascos de la via de cintura, oyendo la radio para pasar el tiempo y los nervios, pero de repente me fijo en las caras de los otros conductores que están a mi alrededor y me doy cuenta de que si no me falla mi capacidad de reconocimiento de nacionalidades, todos tenemos pinta de ser Mallorquines o residentes en la Isla, no veo coches de alquiler, estamos a finales de noviembre, con los mismos problemas y caos de circulación que en el verano.
Ya no podemos hacer culpables a los turistas de la masificación de la ciudad, estamos sólo nosotros, los que pagamos rigurosamente los impuestos y a los que nos han mentido a la cara, diciéndonos que el caos lo originan los turistas. Pero la misma semana cogo varias veces autobuses en la ciudad y es más de lo mismo, congestionados, caros e ineficientes por sus horarios dignos de una empresa privada y no pública.
Ya no valen excusas, la financiación, el déficit, lo mal que lo hicieron los anteriores, queremos soluciones, no es de recibo llegar desde la autopista de Inca con tres carriles y encontrarte con uno sólo para acceder a la vía de cintura, esto si no ha llovido un poco o ha habido un accidente por mínimo que este sea. El segundo cinturón parado desde hace, bueno ni se sabe, a la altura de Son Ferriol se podría hacer un magnífico lago ya que hay un enorme agujero que no se sabe si es para aterrizar naves nodrizas extraterrestres.
Tenemos una Ciudad de Palma sucia, con deficit de infraestructuras pero a la vez con edificios públicos abandonados a sus suerte, véase Son Dureta, el edificio de Gesa y otros funcionando al 10% como es el Palma Arena y para terminar el rosario de ineficiencia, un prometido tunel de Soller gratis para septiembre y que seguimos pagando todos los que queremos acceder a esa localidad. Sólo el Palacio de Congresos puesto en manos de la inciativa privada ha empezado a dar vida a nuestra ciudad.
Con todo esto lo único que quiero decir es que dejen de hacer política y se pongan a trabajar, que dejen de hacerse fotos y viajes y saquen adelante lo que los ciudadanos necesitamos con urgencia, aunque sea para justificar sus sueldos.
Palma me mata, pero es mi casa, nací aquí, vivo en ella y la adoro por eso pido respeto a todos los que vivimos en esta priviliegada ciudad, sino sabemos hacer mejor esta ciudad y repito mejor, no al gusto de unos cuantos, es que no son dignos del puesto que ocupan. Hoy lunes empezaré el día con un atasco como cada día, pero espero que me queden pocos ¿usted que opina?