Otra semana perdida

En esas cuentas de la lechera de cada semana, que si estamos a tantos del play off, que si a tantos otros del ascenso directo, olvidamos que el Mallorca debería no estar cerca (de), si no estar ahí. Por presupuesto y por plantilla, ni que sea en cuanto a nombres. Sirve de poco ir sacando algún que otro punto fuera de casa si luego en Son Moix se castiga de esta forma al abonado, hastiado como está de tanta decepción.

El vestuario ya se ha quedado sin la coartada de los líos en la planta noble y se ha dado cuenta de que, con respaldar la labor de su técnico, tampoco es suficiente. Y eso que el sábado el juego fue gaseoso por momentos y el Mallorca debió zanjar el choque con las primeras ocasiones, pero la sensación de fragilidad qur proyecta este grupo es tremenda. Otra semana perdida, otra semana buscando a quién echarle la culpa.