Estoy harto de tanta demagogia y tantas mentiras, harto de políticos olvidadizos que no recuerdan la gestión que realizaron, harto de estos 17 reinos de taifas sanitarios, en los que cada uno va por libre y hace lo que le da la gana, con la paradoja de que lo que es blanco en un sitio es negro en el otro y viceversa. El Pacto puso en marcha, el 14 de febrero de este año, en el Hospital Son Llàtzer, como regalo de San Valentín, un programa piloto de envío de facturas tanto por correo electrónico y postal a los pacientes dados de alta, unas cartas informativas en las que quedaba reflejado el coste total de su estancia hospitalaria o de su proceso asistencial. Ahora, la Comunidad de Madrid, gobernada por Esperanza Aguirre, ha hecho lo mismo y los socialistas, liderados por Tomás Gómez, la han acusado de “estar preparando el camino hacia el “copago sanitario al emitir la factura informativa con lo que hubieran costado la prestación recibida por el paciente”. ¿Qué podemos pensar o decir? ¿Qué los socialistas piensan una cosa en Madrid y otra en Baleares? ¿Qué actúan movidos por intereses personales? ¿Qué desconocen totalmente lo que sucede en el resto de comunidades? ¿Qué cada uno gobierna según le da gana? Al final, y viendo estos ejemplos, lo mejor va a ser devolver las competencias al Estado y que gobierne de una forma racional, justa, coherente y equilibrada, poniendo fin a toda esta locura.
