MARIA JUAN. Estoy totalmente de acuerdo con Juan Moreno.
Sí, ya saben ese periodista nacido en España, criado en Alemania y que ha puesto los puntos sobre las íes desde el medio en el que trabaja, el periódico alemán Der Spiegel.
Solamente ha explicado lo que pensamos muchos en este país nuestro.
El tema de la corrupción le enerva.
La presunta corrupción de los muchísimos políticos, banqueros y otras especies, imputados algunos, sospechosos muchos, es de escándalo.
Devuelvan lo que no fue suyo, tributen donde deben, aligeren la justicia.
Trabajen señores políticos, ustedes que tienen mucho trabajo y posibilidad de llevarlo a cabo.
Trabajen de verdad. Todos.
Los ciudadanos opinaremos y exigiremos nuestros derechos.
Un mundo ideal, sería éste.
Volviendo a Juan Moreno, resulta que le han invitado a ser el pregonero en las fiestas de su pueblo de origen y su familia teme que pueda decir lo que piensa de España y sus políticos, desde el balcón municipal.
Esto me encanta. Esta es la realidad que nos define. Rindamos pleitesía al cuadro de mando, y no nos cuestionemos nada más.
El que tiene el poder, tiene la razón. Esperemos a qué lleguen los otros, si éstos no nos gustan.
Mientras la oposición duerme en la lista de espera.
No pretendo convertir a Juan Moreno en un nuevo gurú, pero sirve su artículo para reflexionar.
Opinemos libremente, exijamos lo que nos pertenece y con responsabilidad, debemos cumplir con nuestras obligaciones.
Para gustos son los colores, no para alternar poder sin opción.