Clifford Boyson, de 66 años, y residente de Davenport conoció en persona a su hermana de 70 años, Betty Billadeau. Ella condujo desde su casa en Florissant, Misurí (EEUU), con su hija y su nieta para el encuentro, en un hotel en Davenport.
Boyson y Billadeau intentaron encontrarse durante años, pero sin éxito. Fueron colocados en diferentes casas de adopción en Chicago cuando eran niños.
Entonces, Eddie Hanzelin, de 7 años de edad, hijo del casero de Boyson, se involucró en el asunto.
Eddie logró encontrar a Billadeau al buscarla en Facebook con su nombre de soltera. Reconoció el parecido familiar cuando vio su fotografía.
"Dios mío", dijo Boyson cuando vio a Billadeau, antes de abrazarla. "Tienes una hermana", dijo Billadeau. "Eres más o menos de la misma estatura que mamá", dijo Boyson.
La hija de Billadeau, Sarah Billadeau, de 42 años, y la nieta, Megan Billadeau, de 27 años, lloraron durante el encuentro.
"Él no tiene a ninguna mujer en su vida", dijo Sarah. "Vamos a solucionar eso muy rápido".
Boyson dijo que espera visitar a Billadeau cerca de San Luis, y conocer a más familiares. "Espero poder ir y pasar una o dos semanas", dijo. "Quiero conocer a todos. Nunca supe que tenía una familia grande".
Eddie, que suele jugar con el iPad de su familia, declaró que está feliz de haber podido ayudar a concretar la reunión familiar. "Clifford no tenía familia, y la familia es importante", dijo el niño.
Casi al final de esta reunión llena de lágrimas, Boyson y Billadeau le regalaron a Eddie un cheque de 125 dólares (unos 93 euros) en reconocimiento de su labor detectivesca.
