El Consistorio recuerda en un comunicado que dieron luz verde a la ampliación de espacio en la calzada para ayudar a los negocios de restauración tras meses de duras limitaciones en su actividad.
Los exteriores, se sabe, son zonas más seguras ante los contagios por la ventilación natural, frente a los interiores que evidencian mayor riesgo al concentrarse los aerosoles de Covid. De ahí que los ayuntamientos favoreciesen la instalación de mesas y sillas en las calles, ganándole terreno a los coches y no a los peatones.
Sin embargo, Manacor -al igual que Palma- considera que la rebaja de restricciones por parte del Govern -que deja en un 75 por ciento el aforo máximo en interiores- es suficiente para que la restauración vuelva a su estado de actividad normal.
"Esta autorización de carácter excepcional, provisional y temporal, se concedió en 2020 y ha sido prorrogada también el año 2021. Dado la mejora de la situación sanitaria y la flexibilización de las medidas, el consistorio ha decidido poner fin a estas autorizaciones", informa el ayuntamiento en una nota.
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