Después de unos años complicados para todos y donde un encuentro así era casi impensable,el lunes se pudieron degustar los más de veinte vinos que comercializa la bodega en la isla, como los tradicionales Crianza y Blanc de Blancs, los Veritas, los Pedra, los DUES...
Como novedades, podríamos destacar los Ferrerets: vinos blancos elaborados 100 por cien con variedades autóctonas de las viñas de la comarca de Binissalem: Ferreret Mantonegro, Ferreret Mantonegro-Callet y Ferreret Giró Ros y Ferreret Moll.
También destacaba Pep Perico por su tamaño: una selección especial limitada de reservas en formato mágnum de las añadas 2000 y 2001 con las que se homenajea al fundador José L. Ferrer. con su "mal nom", Pep Perico.
En esta ocasión, los anfitriones han sido la cuarta generación de la bodega familiar: María, Pepe y Oscar Roses Lambourne, que han conversado con los invitados mientras sonaban las trompetas de la banda de swing Monkey Doo.
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