El Sindicato Médico de Baleares (Simebal) ha reclamado este lunes que, mientras dure la actual pandemia, se dote de material de protección específico a los equipos del SAMU 061, como buzos impermeables con capucha certificados en sustitución de las batas impermeables, que califica de "inoperantes".
En un escrito dirigido al director gerente de la Gerencia de Atención de Urgencias (GAU) 061, Antonio Bellver, y al jefe asistencial, Txema Álvarez, la organización sindical asegura que el material de que disponen los equipos asistenciales para evitar contagios supone "una protección insuficiente para el ámbito extrahospitalario".
Simebal ha explicado que la asistencia extrahospitalaria que ha de llevar a cabo el personal sanitario "implica la entrada en domicilios contaminados", donde estos trabajadores "se exponen a la acción del virus".
DATOS REALES SOBRE PROFESIONALES CONTAGIADOS
Por otra parte, el sindicato médico ha remitido un nuevo escrito al director general del IbSalut, Juli Fuster, en el que ha denunciado la "falta datos reales de los profesionales contagiados", así como la "escasez de protección" para los sanitarios. En la carta, la organización encabezada por Miguel Lázaro expone la necesidad de contar con información fidedigna sobre el material sanitario que va a llegar a Baleares, y los criterios que utilizará el IbSalut para distribuirlo.
El sindicato médico también ha pedido "actuaciones concretas para evitar el contagio" en los sanitarios y "detener el blanqueo mediático". A criterio del Simebal, "es tan inaceptable el alarmismo como el blanqueo de la situación de precariedad y emergencia dentro del propio servicio de salud".
Por último, la entidad ha reiterado nuevamente que los datos publicados por el Ministerio de Sanidad sobre la incidencia del Covid-19 en Baleares divergen de los que facilita el Govern autonómico, y ha asegurado que entre ambas administraciones hay "descoordinación en la información sobre salud laboral".
Asimismo, el Simebal exige que se establezcan medidas de apoyo psicológico a los profesionales, y se planteen cambios y reducción de horarios y de turnos, así como realizar tests masivos a personal sanitario y a la población en su conjunto.