El Sindicato Médico de Baleares ha planteado por escrito este miércoles al gerente del Servei de Salut, Juli Fuster, un conjunto de necesidades urgentes que el personal sanitario precisa resolver cuanto antes para plantar cara con plenas posibilidades al actual resto del Covid-19.
El primer punto que expone la organización sindical presidida por el médico y psiquatra Miguel Lázaro hace referencia a las carencias de material, una situación que, según el Simebal, "está afectando a la salud del personal médico, a la calidad de la asistencia y a la moral de los profesionales". El sindicato asegura que si bien "la información que se da en los medios es que se compran partidas de material", la "triste realidad" es que "se está trabajando sin medios de protección adecuados y el número de médicos que están infectándose no para de crecer".
Por otro lado, el Simebal hace referencia en su carga al máximo responsable del IbSalut a que las comunicaciones diarias que realiza el Ministerio de Sanidad "son más bajas en cuanto a número de pacientes hospitalizados e ingresados en UCI que las que proporciona la Conselleria de Salut", aunque, según la organización, éstas últimas "son, sin duda, más reales". El sindicato insiste en la necesidad imprescindible de que el Gobierno central "conozca la situación real de Baleares, si tienen que enviarnos material, ya que las diferentes partidas llegaran en función de los datos oficiales".
Al mismo tiempo, la entidad hace mención en su escrito de que el Sindicato cuenta con profesionales que cuentan con amplios conocimientos en la gestión de catástrofes. A este respecto, el Simebal ha insistido en ponerse a disposición del IbSalut y de la dirección general de Salut Pública para aportar su colaboración.
Desde el punto de vista de la salud laboral, el Simebal ha denunciado que las incidencias en este campo "son diarias", sin que exista, en su opinión, "un criterio unificado en las gerencias sobre cómo actuar con el personal hospitalario, ni tampoco con el de Atención Primaria". La organización explica que la respuesta habitual de la administración es remitir a los profesionales a "los protocolos vigentes, sin dar más explicación, con indicaciones vagas, y todas ellas de forma oral". Sin embargo, según señala el Simebal, "después, los protocolos no se aplican". Por ello, el sindicato es partidario de "una coordinación total y una realización de test masivos a todo el personal sanitario".
A su vez, la entidad más representativa del sector médico en Baleares apuesta por "adoptar medidas urgentes y preparar un plan de choque específico" para frenar el elevado número de contagios entre los profesionales que trabajan en centros sanitarios y hospitalarios. El Simebal ha recordado que la administración "lleva anunciando desde hace días que llegaran los tests rápidos", pero estos, según apunta, "aún no han llegado, y tampoco se sabe cuándo lo harán".
Paralelamente, la organización encabezada por Miguel Lázaro ha recordado unas recientes manifestaciones de la presidenta del Govern, Francina Armengol, afirmando que en la sanidad balear no habrá déficit de respiradores, y anunciando un plan de choque que comprendería el incremento de camas, tanto en UCI como en hospitalización. A pesar de que el Simebal aplaude estas medidas, reclama, al mismo tiempo, "transparencia, porque se deben de hacer públicos los detalles y explicarlos a los profesionales, para que puedan trabajar respaldados y con algo de seguridad".
Finalmente, las principales prioridades en el combate contra el Covid-19 en Baleares pasan, según el sindicato, por la realización de pruebas rápidas al personal sanitario y al conjunto de la población, llevando a cabo la toma de muestras fuera del domicilio, y por la posibilidad de posibilidad de hospitalización en hoteles para todos aquellos pacientes con coronavirus cuyo traslado a estos establecimientos pueda resultar factible. Otra opción que apunta el Simebal es la utilización de la Terminal A del aeropuerto de Son Sant Joan y su conversión en un hospital de campaña.