La obesidad es un pandemia. Se trata de una enfermedad crónica, compleja y multifactorial, que tiene complicaciones medicas y psicológicas importantes, que afecta la calidad de vida y que disminuye la esperanza de vida. Hay una serie de mitos sobre ella y la reducción de peso que son los siguientes: La mayoría de los problemas de peso son heredados.
La persona cuyos padres fueron obesos, o que lo ha sido desde la niñez, es probablemente “gruesa por naturaleza”. Es normal aumentar de peso a medida que avanza la edad. Pesarse a diario aumenta la motivación para reducir peso. Es posible reducir peso consumiendo alimentos naturistas. Los problemas hormonales, sobre todo las deficiencias de tiroides, son responsables de muchos casos de obesidad.
El modo mas rápido para perder peso consiste en eliminar de la dieta todas las grasas y todos los carbohidratos. Las personas que fracasan en su intento de bajar peso a menudo carecen de fuerza de voluntad. Un consejo: Nunca buscar el corto placismo. Algunas dietas que pueden tener efectividad a corto plazo, son inadecuadas a largo plazo por la deficiencia de algunos nutrientes esenciales.
Hay una miscelánea de dietas que prometen una fácil perdida de peso con un mínimo esfuerzo y son por lo general promovidas fuera del ámbito sanitario .Consultado el profesional, este tiene la responsabilidad de evaluarla y responder de forma contundente. No hay alimentos “mágicos” ni dietas milagro.
Esta muy extendida la creencia de que la obesidad es un problema de grandes ingestas o transgresiones mantenidas, por lo que se dice “NO-SE-COME-TANTO-COMO-PARA. ”Muchos pacientes que siguen dietas suelen infravalorar cuantitativamente su ingesta y mantener una ingesta calórico superior a la prescrita en la dieta.
Hay que comer menos que antes y comer menos que los familiares de peso normal. Por otra `parte es comúnmente aceptado por los profesionales de la salud que el éxito del tratamiento de la obesidad a largo plazo depende de la consecución de cambios en el estilo de vida.
Paradójicamente la opinión pública mantiene el convencimiento y la creencia de que existen vías mas rápidas y fáciles de perder peso que no requieran la adhesión a estos regimenes.