La dotación económica para familias con alumnos de escuelas infantiles de 0 a 3 años se ha duplicado este año con respecto a la cantidad dedicada a estas ayudas hace dos años en Maó. Las becas para alumnos de estos centros se han implantado en este mandato, en 2012 se distribuyeron cinco mil euros en este objetivo y en los presupuestos de 2015 la cifra alcanza los 30.000 euros.
Los recursos provienen del Consell insular, que realiza una distribución entre los municipios en función de la matrícula que registran los centros de educación infantil. La cantidad que la administración insular aporta este año a Mahón es de 18.944 euros, volumen al que el Ayuntamiento suma 10.868,77 euros de su propio presupuesto.
“Mejoramos esa dotación desde el área de servicios sociales con el fin de cubrir las nuevas necesidades que se generan a lo largo del año y, de este modo, poder llegar a familias que, a principios de curso o principios de año, no tenían previsto o no tenían necesidad de este servicio”, explica la alcaldesa.
La alcaldesa valora asimismo la inversión en infancia que supone este capítulo, en consonancia con las recomendaciones incluidas en el informe de Unicef Baleares presentado ayer en el Ayuntamiento, “la inversión en infancia es, efectivamente, uno de los pilares para la garantía de los derechos de niños y niñas”, añade Águeda Reynés anticipando una de las consecuencias recogidas también en el informe, la disminución de matrículas en el primer ciclo de educación infantil por las dificultades de las familias para asumir las mensualidades.