El Consell de Govern ha aprobado este lunes la asignación de los 15 millones de euros que aportará a los consells insulars para las ayudas de 1.500 euros mensuales a negocios de restauración y gimnasios durante los meses de enero, febrero y marzo.
Mientras que el Consell de Mallorca recibirá 11,2 millones, el de Ibiza se queda con 2,3, el de Menorca con 1,1 millones y el de Formentera con 210.000 euros. Por su parte, las instituciones insulares deberán aportar la misma cantidad para llegar a los 30 millones previstos para estas ayudas directas, tal y como se acordó en el marco del Pacto para la Reactivación del pasado 15 de enero.
Podrán solicitar las ayudas los titulares de establecimientos de restauración, "las empresas deportivas con espacios cerrados propios, las academias de actividad física, danza y yoga, así como empresas con dedicaciones principales de jacuzzis, balnearios y similares".
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Cabe recordar que estas ayudas se activaron días después de la primera protesta masiva del sector de la restauración de Palma. Más de 4.000 personas salieron a la calle para quejarse ante la falta de ayudas a sus negocios después de decretar el cierre total de los mismos por el avance del coronavirus.
No satisfechos con el acuerdo alcanzado, la plataforma 'La Resistencia' volvió a convocar una nueva queja el pasado viernes, en este caso motorizada -aunque hubo quienes la secundaron a pie- y advirtieron que, de no concretarse mejoras esta semana, las manifestaciones continuarían. La siguiente está prevista para este sábado 30 de enero.
Un día antes, sin embargo, el Govern celebrará una reunión extraordinaria para revisar las restricciones en función de los últimos datos epidemiológicos. En el encuentro se decidirá si se mantienen, se endurecen o se relajan las medidas en vigor.
Hay que recordar que el portavoz del Comité Autonómico de Gestión de Enfermedades Infecciosas, Javier Arranz, anunció públicamente su negativa a aliviar las restricciones aunque se aprecien mejoras en los datos de incidencia acumulada. "En un futuro próximo" no se tendrían que rebajar, afirmó, para evitar "un efecto rebote".