Llega el Año Nuevo y con él las buenas intenciones. A partir del dos de enero vamos a dejar de fumar, a hacer ejercicio cada día, a iniciar una dieta, a gastar menos, a estudiar inglés… Intenciones todas ellas que nunca se cumplen, por lo que nuevamente el uno de enero de 2012 volveremos a formularlas y a olvidarlas en un par de semanas. No obstante, hay algunas que no deberíamos echar en saco roto, como el llevar una vida saludable. Empecemos poco a poco, con ejercicio moderado, más frutas y verduras en nuestra dieta y menos dulces y bollería, y pocos o ningún cigarrillo. Dicen los expertos que hay que marcarse metas reales y no intentar cumplir todos nuestros objetivos a la vez, por eso, si de verdad queremos que esas cosas que tenemos pendientes lleguen a hacerse realidad, vayamos despacio, una a una y al final se habrán cumplido. Y aprovechando que el 2 de enero los fumadores lo van a tener mucho más difícil, en lugar de enfadarnos con el Gobierno pensemos que puede ser un buen momento para dejar el tabaco, porque, aunque hagamos oídos sordos a las recomendaciones de los expertos, la verdad no es otra que fumar es perjudicial para la salud. ¿Qué muchas otras cosas lo son? De acuerdo, pero evitemos las que podamos. Y Molts d’Anys.
