Viendo como en los últimos años la derecha política y mediática ha querido manipular y tergiversar el relato de todos lo acontecido en referencia a Catalunya, a la moción de censura de Pedro Sánchez y a todo lo que tenga que ver con Podemos y el auge de los movimientos de izquierda no nos podemos ni imaginar cuánto nos habrán mentido reescribiendo la Historia a su antojo. Desde la Guerra Civil, la dictadura franquista o la tan cacareada Transición española.
La derecha junto a los poderes fácticos como la Iglesia o la banca han arrimado siempre el ascua a su sardina. Compinchados con los medios de comunicación llevan más de un siglo mintiendo como bellacos todo con tal de no perder su cuota de poder. Cuando ellos dieron un golpe de estado en 1936 lo llamaron “glorioso alzamiento” en cambio cuando los catalanes organizaron un referéndum si que lo llamaron golpe de estado y lo maquillaron con palabros como sedición o rebelión. En connivencia con un sistema judicial partidista y muy poco justo han organizado un sainete en el Tribunal Supremo para poder encerrar a los organizadores del referéndum del 1 de octubre y así atajar a quien en un futuro osara volver a las andadas independentistas. En España nos estamos “rusificando” y nos da igual que desde Amnistía Internacional, la ONU o cualquier otro organismo internacional nos llamen la atención ante el preocupante acoso a las libertades y a los derechos humanos que se está llevando a cabo desde el Gobierno y otros estamentos del Estado.
Por si fuera poco la irrupción de la peor ultraderecha ha hecho que otros partidos se hayan radicalizado en sus postulados políticos. Donde los ultras ya han tocado poder o han entrado en los diferentes parlamentos autonómicos y ayuntamientos ya han empezado a intentar reescribir la historia atacando las leyes de “memoria histórica” o buscando edulcorar las leyes de violencia machista para así contentar a su retrógrado público electoral. La derecha está vendiendo todos sus principios con tal de gobernar a cualquier precio.
Mientras parece imposible que salga un Gobierno estable después de las elecciones de abril seguimos con una “Ley Mordaza” que es uno de los mayores fracasos de la España del siglo XXI, no nos olvidemos de que el PSOE ya la pudo derogar pero obviamente no le interesa. Los medios de comunicación, la derecha e incluso el Partido Socialista llevan años mintiendo e inventando bulos sobre Podemos y sus líderes. Desde Venezuela, pasando por Irán o Galapagar la guerra sucia y el uso de las cloacas del Estado para difamar a las de Unidas Podemos ha conseguido llenar de dudas y hacerle perder muchos votos al partido morado. El IBEX-35, el viejo socialismo junto con la derecha no permitirán que Pablo Iglesias llegue a entrar en ningún gobierno.
En una España cada vez menos crítica, más anestesiada y más manipulada que nunca todo está perdido. El triunfo de la “idiocracia” es evidente. Hacen con nosotros lo que les da la gana. Nos mintieron antes, ahora y siempre. La peor España parece que ha vuelto para quedarse o mejor dicho...nunca se fue.