La inmensa mayoría de los palmesanos están sorprendidos.
Este lunes es festivo en la capital. Les dicen que es por la festividad de la patrona de la ciudad, la Verge de la Salut. Pero son muy pocos los que saben porqué es la patrona. No hay tradición desde hace generaciones de rezar a esta virgen, a diferencia de San Sebastià (el patrón) o el Crist de la Sang. Curiosamente, la resurrección de la Verge de la Salut como patrona abanderada y homenajeada de Palma ha venido con la democracia y con la llegada del PP a Cort. Dicen que el exteniente de alcalde José María Rodríguez ha tenido mucho que ver en la recuperación popular de esta Verge, que tiene su imagen (probablemente medieval) en la iglesia de San Miguel.
En realidad, la Virgen de la Salud está ligada a Palma desde antes de la entrada de las tropas de Jaume I en la ciudad el 31 de diciembre de 1229. El día 5 de septiembre de aquel año, el grueso de las fuerzas catalano-aragonesas, a punto de embarcar para lanzarse a la conquista de la isla, estaban concentradas en Salou. Celebraron una misa encabezada por el rey. Pusieron sobre el altar una imagen de la Verge de Salut. Eran conscientes que en los combates por Mallorca sufrirían muchas bajas y rezaron por la preservación de sus cuerpos. Jaume I, impresionado, decidió llevarse la imagen de la Verge en su galera. Durante la travesía hubo mal tiempo. El rey imploró ayuda a la Verge y la obtuvo, según la tradición, meses después. Una vez conquistada la ciudad, la primera misa de celebró en la mezquita donde actualmente se asienta la iglesia de Sant Miquel. Allí fue colocada la imagen primitiva, que más tarde sería sustituida por la actual. Por tanto, la Verge de la Salut ya fue patrona de Palma cuando todavía se llamaba Madina Mayurqa y los musulmanes aún ignoraban que una gran Armada se disponía a zarpar para proceder a la conquista de la isla.