La Democracia sindical
sábado 28 de septiembre de 2013, 00:30h
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) define el dialogo social como “todo tipo de negociación, consulta o simple intercambio de información entre representantes de Gobiernos, Empresarios y Trabajadores sobre cuestiones de interés común relacionas con la política económica y social”.
Está claro que el actual Govern de Bauzá solo práctica el simple intercambio de información con los agentes sociales o la simple consulta, brillando por su ausencia la negociación en los múltiples foros que existen para el dialogo social y que ante la crisis han fracasado y no sirven para la generación de empleo, bienestar social y defensa de los derechos de los trabajadores.
El dialogo social en las últimas décadas ha estado basado en la participación institucional de los agentes sociales, en el caso de CC.OO y UGT abandonando su papel de lobby sindical por el de agentes institucionales fuertemente subvencionados por las instituciones públicas y aplicando torticera y abusivamente el término “sindicato más representativo”, término que para quién no lo sepa son aquellos sindicatos que tienen el 10% de los representantes en las empresas que se eligen en toda España, aunque estemos hablando del dialogo social en Baleares.
No reclamo el derecho a recibir ningún tipo de compensación por defender los derechos de los trabajadores y de las trabajadoras, salvo la cuota sindical, lo digo por si alguna persona quiere hacer el chiste fácil, porque creo que el dialogo social en sí mismo es bueno, el problema es cuando se convierte en el “chiringuito” de unos pocos y no representa al máximo de trabajadores y trabajadoras.
Si a esta reflexión le añadimos “el tiro de gracia” que la reforma laboral nos pega a todos los sindicatos sin excepción en la negociación colectiva, deberíamos buscar formulas para democratizar el marco sindical que permitieran una unidad sindical más amplia y que fuera más allá de las bases sindicales en las empresas y los convenios.
Como ejemplo reciente el de los sindicatos Italianos (CGIL, CSIL y UIL) que han alcanzado un acuerdo por el que a partir del 5% de representatividad una organización sindical podrá sentarse a negociar un convenio colectivo.