El Museo del Palacio, más conocido como la Ciudad Prohibida, ha comenzado a construir una nueva sede en las afueras de Pekín como parte de un programa de conservación del patrimonio cultural del país, informa el periódico China Daily.
El proyecto prevé la construcción de un complejo de 62 hectáreas en el que se exhibirán reliquias culturales del que fue el palacio imperial de China desde 1420 hasta 1911, y abrirá al público en 2020, cuando se cumpla el 600º aniversario de la Ciudad Prohibida, comentó al rotativo su director, Shan Jixiang.