Las cifras, repartidas en 7 jornadas y a su vez en 24 trayectos -ida y vuelta- para cada una de las dos líneas puestas en marcha, dan 6 pasajeros de media por cada autobús.
Números pobres para una de las medidas estrella de esta legislatura, que consiguió poner en pie de guerra al sector del taxi (después se firmó la paz con 4 de las 5 asociaciones).
En el Govern calculan que serán más de 330.000 las personas que utilicen las nuevas líneas durante la temporada alta. El conseller Marc Pons explicó el pasado miércoles, cuando se puso en marcha este servicio, que con éste "se da un paso al frente para seguir trabajando y ofreciendo un servicio público de máxima calidad y accesible a todo el mundo, tanto a residentes como a turistas, para que sea más cómodo y fácil".
No obstante, aún quedan líneas por poner en marcha: la A42 que conectará Cala Bona – Cala Millor – Aeropuerto y se iniciará el 1 de junio y la A51: Cala d’Or – S’Arenal de Llucmajor – Aeropuerto, que arranacará el 15 de junio.