El president del Govern de Cataluña ha llegado este lunes, poco después de las 8.30 horas, a las inmediaciones del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) donde es juzgado por desobediencia por haberse opuesto a retirar la pancarta del Palau de la Generalitat a favor de los políticos presos.
Torra no contestará a las preguntas de la acusación popular representada por Vox, al tratarse de "un partido franquista" y tampoco lo hará a las del ministerio fiscal.
Durante su intervención, el president ha reconocido que desobedeció porque "era imposible obedecer una orden ilegal. Cumplí mi deber como president de la Generalitat, que es defender los derechos y las libertades de mis conciudadanos".
Además, ha alegado que la Junta Electoral Central “no es un órgano superior” competente para ordenarle retirar lazos.
El fiscal pide para Torra 20 meses de inhabilitación para ejercer cargos públicos al acusarle de un delito de desobediencia; además, pide una multa de 30.000 euros. Sii es condenado e inhabilitado, se abriría el camino a unas elecciones anticipadas en Cataluña.
Torra, que ha llegado arropado por un centenar de personas, entre las que no han faltado los miembros de su equipo como Pere Aragonès o el presidente del Parlament, Roger Torrent y el expresidente del Govern, Artur Mas, podrá recurrir ante el Tribunal Supremo la sentencia.
