Me dirigí a la localidad mallorquina de Petra, donde hace unos meses instaló su taller-estudio y nuevo domicilio familiar, un artista que se ha especializado en pintar murales de todos los tamaños. Nos abrió las puertas y nos mostró su espacio de creación. Entramos por la parte lateral a través de un portón de garaje y vi un tórculo y unas estanterías en las que había colocado unos números elaborados con cerámica…
Es un encargo del Ayuntamiento de Llubí. Son los nuevos números para las casas de las calles del pueblo. Es un trabajo hecho con Iria Rodríguez.
Seguimos por un jardín que está acondicionando, prácticamente todas las dependencias están adosadas a la casa…
Hace poco tiempo que nos hemos instalado aquí y todavía nos queda mucho por hacer.
A la derecha una escalera que conduce a su estudio. La temperatura ambiente es muy agradable. Ahí empezamos…
Hijo de Martina de profesión maestra, natural de Sa Pobla y de Esteva de profesión administrativo, natural de Palma, tienen dos hijos; Esteva y Joan nuestro protagonista, que nace en Palma un 19 noviembre de 1983.
…declarado por la ONU como el Año Mundial de las Comunicaciones, fue el comienzo oficial de Internet y se recuerda por la primera llamada a través de un móvil, el Gobierno de Felipe González nacionalizaba la empresa Rumasa, se lanzaba al mercado el primer CD, se celebraban las primeras Elecciones al Parlamento de las Islas Baleares, Nintendo estrenaba el video juego Mario Bros, el récord de registro más bajo de temperatura del planeta, ocurría con -89,2 C. en la Base Vostok de la Antártida, Madonna debutaba con su primer álbum, en España entraba en vigor la nueva ley laboral estableciendo 40 horas semanales de trabajo, se inauguraba en Barcelona el canal Televisión de Cataluña TV3, en fútbol España se clasificaba para la Eurocopa 84 venciendo por 12 goles a 1 a Malta, el verano se presentaba con la seria amenaza de restricciones de agua en diversas zonas de Mallorca, apoteósico concierto de Ella Fitzgerald para cerrar el III Festival de Jazz de Palma de Mallorca.

Ya que controla la faena desde arriba y desde abajo, ayúdenos a desvelar su punto de visión ¿Qué es un mural?
Es la consecuencia de un trabajo para mi emocional, no me gusta tener demasiadas referencias, no me gusta saber cómo voy a acabar, si fuera así me aburriría, la mediación en un gran formato sobre un muro o una pared es siempre un nuevo reto y esto es lo que me gusta, sin boceto y todo por descubrir. El mural es un mensaje para reflexionar sobre las culturas.
Conocer a Joan Aguiló, significaba adentrarme en parajes transformados, paisajes mutantes, murallas por las que él ha ascendido y descendido, subirme a su misma grúa y verle ataviado con cuerdas, casco y otros elementos de seguridad, preparado para dar vida a una superficie que en otro caso seguiría siendo una cara oculta o inadvertida.
Un día no muy lejano ocurriría, un primer encuentro con la pintura…
Tiene que ver el hecho de que mi madre fuese profesora de plástica y mi insistencia en pedirle que me pusiera trabajos de manualidades. Así que los sábados que eran sus días libres los aproveché para aprender. Desde muy pequeño siempre supe que quería pintar.
Captor de lo cotidiano, de las esencias, de figuras representativas en la geografía que nos envuelve. Sus obras se plasman a lo largo y ancho de la isla, escenas similares a las de la calle, de las plazas, de un bar cualquiera, de una estación, de un colegio cualquiera.

¿Cómo narraría en un diario, un recuerdo de su infancia?
La pase viviendo de lunes a viernes en el barrio palmesano de Ses Estacions y en Can Picafort, los fines de semana y las vacaciones de verano. Mis padres tenían casa pero en verano, trabajaban y subían los fines de semana. Nosotros nos juntábamos con los primos, y todos estábamos en casa de la abuela Ángela paterna, con su hermana, su marido el abuelo Miguel murió joven y apenas le conocí. Éramos siete y además también los amigos. Todo el día en la calle y en la playa, éramos libres en un paraíso de mar y en una zona protegida. Por las tardes la abuela y su hermana nos echaban de casa, querían ver la fotonovela de televisión y nos llamaban para merendar o cenar.
Otra parte de mi niñez, la viví con los abuelos Joan y María por parte de madre. Eran de Sa Pobla, tenían terreno, gallinas, conejos, y a veces acompañé al abuelo a recoger patatas, para mí era una especie de juego, más adelante fui consciente del trabajo y del sacrificio que eso conlleva.
¿Qué puede contarnos de cómo se sucedieron sus estudios artísticos?
Estudié bachillerato artístico en la Escuela de Artes y Oficios de Baleares y al finalizar hice ilustración. Conocí a Carmen Crespí, que era una profesora de dibujo y pintura de un nivel impresionante, con quién aprendí mucho. Me daba libertad, me hacía creer en mí y me enseñaba como perfeccionar sin olvidar mi improvisación, me corregía explicándome cada detalle. Me enseñó a entender las emociones, la pasión que se siente al dibujar y que acompaña a la técnica y a la teoría. A veces por si sola es suficiente.
Entre 2004 a 2008 acudí a la Facultad de Bellas Artes de Sant Jordi de Barcelona. Me decepcionó la poca implicación de los profesores de Bellas Artes y por eso con otros estudiantes creamos la Asociación de Estudiantes, con la intención de elevar nuestras quejas por la desidia de algunos de ellos. Había cosas fundamentales que precisaban de explicaciones óptimas y que no se sucedían.

Continúa sus estudios fuera de España…
Acabé la carrera en Méjico. En 2009 y en 2010 viví en DF y luego en Veracruz, allí hice un máster y colaboré con mi compañera de aquel entonces en un trabajo de estudio sobre una música tradicional. Me fascinó la ayuda que se prestan en comunidad.
La música tradicional de Veracruz es el son jarocho, un género musical folclórico que se originó en la región del Sotavento. Se caracteriza por sus coplas cantadas y sus ritmos enérgicos.
En 2011 regresa a Mallorca, se instala en Sa Pobla en casa de su abuela, donde monta un taller. Pasa días pintando paisajes clásicos al óleo y hace alguna exposición, pero siente que la soledad le supera. Sin esperarlo surge la posibilidad de trasladarse a Alemania.
Marché a Berlín con Catalina, mi actual pareja, con el fin de acompañarla. Le habían ofrecido unos trabajos relacionados con el mundo del teatro. Yo que hablaba perfectamente inglés, conocí a artistas que se dedicaban a salir en grupos y realizar procesos creativos compartidos, era un tema social y me llamó la atención. ¡Eso es lo que quiero! - me dije, y me animé. Había mucho arte urbano, alrededor bullían tantas actividades. Con la pintura se inventaban juegos creativos en los que el espectador era parte activa. Un artista creó un concepto visual con una niña y un osito de peluche, la gente se integraba en las historias, era un continuo aliciente.
Pasado un año, de nuevo regresa a Mallorca…
De nuevo en casa, pensé en desarrollar una idea sobre arte rural. Me instalé en Palma con la intención de formar un colectivo implicado en salir a crear, pero no salió bien, no encontré acompañantes y me vi solo, lo cual no impidió que lo pusiera en marcha a mi manera.

¿Intervenir las paredes o los muros, era legal?
En 2011 empecé a buscar paredes en mal estado y para no intervenir directamente, preparé en mi taller unos collages (paste up), algo parecido a los carteles, con figuras cotidianas, una señora en un balancín, un niño lavándose en una cuba, un grupo de niños con globos. Uno de estos papeles, diez años después, sigue ahí donde lo coloqué y cuando se ha deteriorado, los mismos vecinos lo han restaurado, está junto al Teatre Sans, y se conserva perfectamente. Al principio me acompañaban Catalina y mi amigo Damià incluso me aconsejaban no firmar las obras, pero no me parecía justo hacerlo con pseudónimo o dejarlo en blanco. Al final puse mi nombre, quería saber la opinión de la gente, aun temiendo a posibles consecuencias. Eran trabajos hechos con la técnica del esténcil, un sistema de impresión a partir de una plantilla.
Los dibujos gustaron y llegaron los encargos y los permisos.
Era una época de creatividad de experimentar con diversas técnicas.
En ese tiempo me interesé por el muralismo y viaje a Londres y a Berlín para pintar en las calles.
Cambiamos de tercio y aparcamos por unos instantes esa parte de la historia y nos acercamos a sus aficiones.
¿En qué tipo de literatura se sumerge?
Tuve una época de leer mucho a Murakami, Kafka en la orilla, Tokio blues, etc. o a García Márquez y hoy en día a otros. La lista sería muy larga.
¿Hay algo del mundo del cine, atesorado en su caparazón?
Por lo que han significado en mi vida, me quedo con la dirección de varias películas de Spielberg y de Tarantino y especialmente con Pulp Fiction. Actualmente veo y sigo producciones coreanas o japonesas.
¿Qué música le acompaña?
Depende de mi estado de ánimo, al empezar a pintar por la mañana Buena Vista Social Club, pero a medida que avanza el día puedo ir cambiando hasta el rock duro, o el rap.

¿Tiene algún deseo por cumplir?
Me gusta lo que hago, me conformo con lo que tengo, pero puestos a pedir me gustaría pintar un mural en Berlín.
¿Alguna vez se ha emocionado frente a una obra de arte?
Sí, me sucedió en Francia, visitando el Museo del Louvre frente a la escultura de la Victoria de Samotracia, está situada sobre un pedestal y cuando la vi me quedé impresionado, noté la sensación en toda la piel.
Esta escultura griega también es conocida por Niké de Samotracia, es una escultura elaborada hacia el 190 a. C. en mármol con una altura de 2,75 metros, hallada en 1863.

¿Siente admiración, veneración por algunos artistas?
Más que por artistas me fijo en las maneras de proceder de ciertas personas. Por ejemplo, Ferrán Adrià o Pep Guardiola, como plantean su filosofía, como aplican su sabiduría sobre lo que les concierne. Aunque siento admiración por Sorolla como pintor mediterráneo, como captó la luminosidad y los colores, o por las genialidades y la expresividad de Goya.
¿Qué no le agrada del ser humano?
De inicio no tolero que me digan lo que debo hacer o como debo hacer algo, aunque luego analizo y si he de rectificar, rectifico.

¿Qué temas de actualidad son de su interés?
Te diré algunos como la política que a veces dudo de si me interesa, la tecnología, las redes sociales, me gustaría como ser anacrónico que no tuviese que depender de ellos, aunque sé que es difícil o puede que imposible, y es que tal vez soy un romántico.
Recuperamos la sustancia de nuestro diálogo
¿Hay antecedentes artísticos en su familia?
Un tío mío era pintor y hacía esculturas también, la prima de mi abuela Ángelica es la pintora y artista mallorquina María Vich. Conocida por sus pinturas paisajistas y por ser seguidora de l’Escola de Pollença.
Pintando vivió una situación, cuando menos excepcional.
En cierta ocasión, estaba en Bellas Artes, recuerdo que empecé a pintar una obra y no sé como pasó el tiempo que apenas me di cuenta de que había transcurrido y de repente eran cinco horas después. Como si despertase, había pintado algo por encima de mi nivel, unos pies caminando sobre la arena. Nunca entendí que fue lo que pasó.
¿Qué diferencias hay entre pintar un mural en Mallorca o en otro sitio?
Cada vez es diferente. Cada pared o superficie de hierro ya lo es de por sí, sea de donde sea, pero aunque me siento muy identificado con Mallorca, procuro tomar nota de todo tipo de detalles rutinarios, tradicionales y eso me pasa cuando me encargan algo fuera. Debo convertir una pared en una estampa que nos recuerde lo cotidiano, lo cercano, para ello no dudo en tomar café con la gente del lugar, con ver álbumes de fotografías, objetos, elementos icónicos.
Con lo aprendido en Alemania y en Méjico un día decide cambiar la panorámica paisajística de su querido Ca’n Picafort, el contraste de casitas bajas y edificios hoteleros y nace un festival internacional para el que se intervendrán los muros altos y se convertirán en obras de arte para poderlas contemplar desde tierra y desde el mar.

¿Qué es hoy día, Saladina Art Fest?
Después de diez años, esta será la edición 8ª, por la pandemia quedaron dos sin hacerse. Se ha convertido en un festival de arte urbano de primer nivel internacional de gran atracción cultural, al que acuden artistas de prestigio y que no ha perdido su identidad de pueblo, su carácter. La gente se lo ha apropiado, participando activamente y los artistas que vienen son informados antes de pintar de cómo es el lugar y como son los nativos, que es parte de nuestra historia. Sigo en contacto con los que han acudido en estos años, y me consta que la mayoría han hecho amigos. En la fiesta de cierre se vuelca el pueblo entero. Los profesores y los alumnos de las escuelas, su complicidad es total. Algunos empezaron con diez años y ahora con dieciocho siguen asistiendo a la cita anual.
La acogida en su tierra queda clara, pero…
¿Cuál ha sido el impacto a nivel mundial?
Al venir artistas de todo el mundo, ha cogido tanta fuerza que el próximo año voy a Bali como invitado para participar en un evento liderado por una reconocida artista natural de Indonesia, llamada Yessiow que estuvo aquí con nosotros y ha impulsado un festival creado con el mismo espíritu, con la idea de Saladina Art Fest como referente.
¿Todavía quedan murales por pintar en Can Picafort?
Si quedan. Algunos de los primeros murales habrá que restaurarlos. Tenemos un trabajo pendiente con el mural del campo de fútbol que está algo deteriorado. Fue pintado por la gran artista Hyuro que ha fallecido y me gustaría que lo restaurásemos los artistas que quieran implicarse en el homenaje a su figura. Es un mural histórico, como ella.

¿Cuál es el procedimiento después de recibir un encargo?
Una vez que me presentan el proyecto, me dedico a recopilar datos del lugar y del entorno en donde va a estar, me empapo de detalles cercanos,
tomo numerosos ejemplos de lo que voy a representar, quiero estar seguro y empiezo realizando bocetos digitales, prácticamente algo sencillo que me sirva de guía, porque cuando inicio la obra ya visualizo el final. Luego hay un trabajo de estudio de la pared a tratar, para saber que materiales serán los más convenientes, la pintura plástica suele ser uno de los habituales y a veces pintura de esmalte para superficies metálicas.
¿Descúbranos algunos de sus propósitos más inminentes?
Estoy proyectando espacios escénicos, colaborando con los guionistas de una obra, iluminadores, técnicos de sonido, cada uno en su área, yo me ocupo de diseñar los escenarios. Entre otros proyectos, los ya mencionados, el encargo del Ayuntamiento de Llubí, el Saladina Art Festival en su décima edición, el viaje a Bali y continuar con el proyecto “herois anonims” con el que visitamos pueblos de cualquier lugar del mundo y damos a conocer a través de los testimonios a personas anónimas, pero que son relevantes para los vecinos. Estuvimos en un campo de refugiados palestinos en el Líbano, con la comunidad del Barrio de Gracia de Barcelona, también en el barrio Gótico y han sucedido cosas muy bonitas, ahora queremos hacerlo aquí. Catalina, mi pareja, participa en el proyecto, yo me ocupo de realizar una obra y ella aplica una frase emblemática de un poeta o un escritor representativo. Luego se hace una presentación y el resultado es tremendamente emotivo.
Filadelfia como capital mundial de los murales, Bansky, Kobra, Rivera, Blu, Haring, como ejemplos representativos del arte urbano, y Saladina Art Fest, va ganado terreno de la mano de Joan Aguiló, un artista que sin abandonar su capa de piel humilde, se ha convertido en un referente.
Texto: Xisco Barceló
Fotografías: Xisco Barceló y Joan Aguiló