Si Maheta Molango necesitaba una prueba de que su mensaje no cala en lo que queda del mallorquinismo, que tome nota de la falta de inscripciones para la Cursa Popular conmemorativa del centenario que debía disputarse el próximo domingo por la mañana. Claro que para llegar al sentimiento común hace falta algo más que redactar cuatro fases tópicas en las redes sociales. Con ambas realidades t
también se ha dado de bruces Toni Tugores, el presidente de la comisión de festejos que ni siquiera ha podido desarrollar un solo acto decente y concelebrado por todos los mallorquinistas de bien.
En semejante ridículo ha desembocado la gestión de Utz Claassen después de dirigir el club a su antojo, aunque no sin la complicidad sumisa de las penyes, por omisión, y la de sus acólitos, entre ellos más de un juntaletras, por acción. El alemán gobierna sin oposición desde el mes de enero del 2014. pudo mejorar el rendimiento deportivo del equipo en el mercado de invierno y gozó de una segunda oportunidad en julio y agosto. En lugar de aprovechar ambas circunstancias, decidió confiar en quienes le habían ayudado a poner palos en las ruedas durante cuatro años para conseguir un poder efímero, con un discurso triunfalista y apartado del menor conocimiento futbolístico, tanto por lo que afecta a la parcela estrictamante deportiva, como a la infraestructura social y económica. Ahora se desentiende con pueriles excusas para que los pañuelos ondeen contra el consejero delegado en la cara de otro colaborador, seguramente innecesario: Monti Galmés.
La desconexión entre Fernando Vázquez y gran parte de la plantilla era un secreto a voces. Su enfrentamiento con Ortuño, captado por nuestros compañeros de IB3 con sus cámaras, lo ha puesto en evidencia. Pero de eso y de otros detalles habrá tiempo de hablar cuando esta comedia haya terminado y esperemos que bien. No obstante, ahí va un avance: uno de los ojeadores lleva hasta dieciséis viajes observando equipos y jugadores de Segunda, pero de momento nadie del club le ha solicitado ni un informe.
