La radiotelevisión pública de Balears, IB3, ha encargado a la consultora Landwell Price Waterhouse Coopers un estudio para analizar la viabilidad y los mecanismos necesarios para asumir de forma directa los trabajadores que actualmente prestan servicio en empresas subcontratadas, principalmente en el departamento técnico y sobre todo en los informativos. El ente público espera el informe hacia el mes de junio.
La incorporación directa de todo el personal que actualmente trabaja subcontratado significaría que IB3 pasaría de las 100 personas que actualmente son plantilla de la radiotelevisión pública a unas 400, al sumar las 200 de los informativos y las 100 de los departamentos técnicos y de emisiones. Son números redondos a los que se ha referido este jueves el director general de IB3, Andreu Manresa, en su comparecencia ante la comisión parlamentaria de control del ente público.
Manresa se ha mostrado a favor de un proceso de internalización que ofrecería "mayor seguridad y mayor libertad" a los trabajadores de IB3. Para Manresa, antes hay que analizar la viabilidad porque "es un tema económico y de decisión politica". El estudio de la consultora deberá establecer criterios, viabilidad del plan y posibles costes. "La tendencia global en las televisiones autonómicas es que las plantillas de informativos y de técnicos sean personal propio", ha señalado, aunque IB3, junto a las televisiones de Asturias y Aragón, pertenece a la generación de entes autonómicos creados en el último decenio y que optaron por la externalización.
Actualmente, IB3 mantiene externalizados los servicios técnicos, los informativos y la producción de programas. El contrato de informativos fue contratado a Mediapro en febrero de 2017 tras una licitación por un periodo de dos años, que concluye en febrero del 2019, por un importe de 18 millones de euros. El contrato incluye que la productora tiene que aportar la plantilla, las cámaras y los demás medios técnicos, incluidos los coches para los desplazamientos. El contrato permite dos prórrogas de un año cada una, que no serían necesarias si se produce la internalización del servicio.
