Más vigilancia y más controles. Esta es la hoja de ruta que están aplicando a partir de este viernes los efectivos de las fuerzas de seguridad con la finalidad de que los ciudadanos sigan cumpliendo la normativa del Estado de Alarma y se queden en sus casos salvo por motivos plenamente justificados.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, en coordinación con las policías locales del archipiélago, están ampliando aún más, a partir de este viernes, los controles en la vía pública y en las carreteras de Baleares para garantizar el confinamiento domiciliario que establece el Real Decreto del Gobierno que instauró el Estado de Alarma para frenar la expansión del Covid-19.
Entretanto, a lo largo de este pasado jueves, los agentes levantaron cerca de 700 actas administrativas en el conjunto de las islas por incumplimiento de las restricciones. En concreto, Policía Nacional, Guardia Civil y las policías locales detectaron 670 infracciones, 325 de las cuales se contabilizaron en Palma. La mayoría de las sanciones han sido impuestas a ciudadanos que permanecían en la vía pública sin causa justificada y que hicieron caso omiso de las indicaciones de los agentes.
Mientras, en las carreteras de Baleares se han reforzado los dispositivos de vigilancia para evitar desplazamientos innecesarios y trayectos a segundas residencias. Concretamente, la Guardia Civil ha realizado este viernes diversos macro controles en autopistas y vías principales. Además, este jueves los agentes identificaron a más de 6.500 personas y a 6.000 vehículos en los más de 400 puntos de vigilancia que se activaron en las carreteras de las islas.
Por otro lado, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con el apoyo de las Policías Locales, han detenido en el transcurso de estos dos últimos días a siete hombres, cuatro en Mallorca, dos en Eivissa y uno en Menorca, por desobediencia a agentes de la autoridad al estar incumpliendo las restricciones del Real Decreto 463/2020.
Finalmente, en el club náutico de Porto Petro, efectivos de la Guardia Civil procedieron a levantar sendas actas administrativas contra los ocupantes de un catamarán con bandera griega y sin matrículas visibles que había amarrado en el mencionado emplazamiento para obtener avituallamiento, sin contar para ello con ningún tipo de autorización.
