“Yo no he pasado nunca información a Sacresa ni a ninguna otra empresa, ruego que se me crea” ha espetado Miquel Àngel Flaquer al fiscal Pedro Horrach en relación al proceso de redacción de las cláusulas de contratación para la venta de Can Domenge. Miquel Àngel Flaquer, quien ha cerrado el turno de declaraciones en la jornada del miércoles, ha afirmado que el concurso de Can Domenge se sacó en Navidad porque la jefa de contratación Cristina Carreras empezaba una baja por maternidad el 23 de diciembre de 2005 y por ello les urgía cerrar el tema. “El expediente administrativo fue impecable, nadie lo impugnó”, ha afirmado Flaquer, quien ha recordado que ningún funcionario dependiente de él ha declarado haber recibido ninguna presión por su parte para cometer ninguna irregularidad, sino, al contrario, su intención era que el proceso estuviera bien hecho. También ha negado haber hablado nunca del tema de Can Domenge con Maria Antònia Munar como también ha negado categóricamente que Bartomeu Vicens le dijera que Unió Mallorquina recibiría dinero de Sacresa. “Munar nunca trajo dinero a Unió Mallorquina”, ha declarado el que fue secretario de administración de UM, y como tal, también su tresorero. En relación al precio de enajenación de la finca, ha asegurado nunca haber puesto en duda la valoración de 30 millones de euros realizada por Mariano Gual de Torrella. “Me pareció una barbaridad de dinero”, ha espetado un Flaquer que ha afirmado que nadie le avisó de que la valoración fuera errónea.
