"Consideramos que
no cumplía los mínimos requisitos de seguridad y no entendemos como se permitió su apertura", ha señalado la asociación en una nota de prensa.
La
Conselleria de Salud del Govern balear tuvo constancia de la posible intoxicación el 24 de agosto. Según datos proporcionados en septiembre por la consellera de Salud,
Patricia Gómez, en el Parlament, la Dirección General de Salud Pública del Govern ha confirmado
102 casos de afectados, 43 de ellos positivos por 'salmonella'. Varias personas requirieron ingreso hospitalario.
Algunos de los afectados eran residentes, pero otros eran visitantes de diversas regiones españolas, lo que motivó que el Govern balear diera aviso al Centro Coordinador de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) dependiente del Ministerio de Sanidad.
Después de detectar los primeros casos, cuando diez pacientes con síntomas de gastroenteritis fueron atendidos en hospitales y centros de salud, el domingo el local en el que habían comido -un restaurante japonés- fue clausurado, tras detectar diversas deficiencias estructurales y de tipo operacional en una inspección.
Salud anunció que abriría un expediente sancionador. Los técnicos de
Seguridad Alimentaria inspeccionaron también otro restaurante de la misma propiedad, y no encontraron motivos para cerrarlo.
La consellera señaló en su comparecencia que la causa no se podía "establecer en un solo alimento". "Parece que la mayoría comieron de un surtido determinado de alimentos pero sin poder especificar cual de ellos", explicó.
Gómez concretó que el restaurante había pasado una
inspección en 2015, luego otra en junio y, finalmente, la última fue la urgente del mes de agosto tras detectar los casos. En junio ya se detectaron una "serie de deficiencias" de nivel 1 -los establecimientos se cierran con nivel 0-, si bien las consiguieron subsanar en el tiempo estipulado.