Endesa ha adoptado todas las medidas de seguridad necesarias en los centros de control y gestión de las centrales de producción eléctrica de la compañía para asegurar la calidad y la continuidad del servicio ante el estado de alarma para la gestión de la crisis sanitaria ocasionada por coronavirus.
La eléctrica ha desarrollado un protocolo de crisis destinado a definir las acciones de gestión y operación que se implementan en las plantas de producción, puestos de control remoto y salas de control para limitar los riesgos de propagación del virus Covid-19, para prevenir y salvaguardar la salud de los trabajadores, y contribuir a la continuidad del servicio de electricidad, especialmente en las centrales extrapeninsulares, que son esenciales para la garantía del suministro eléctrico.
DOS CENTROS DE CONTROL EN MALLORCA
Se ha desdoblado, de manera preventiva, el personal del Centro de Control de Generación de Sant Joan de Déu en el Centro de Control de Generación de emergencia situado en Marratxí, de forma que los dos centros de control puedan funcionar con las mismas condiciones y de forma independiente uno del otro. Por su parte, cada una de las centrales (Alcúdia, Cas Tresorer, Son Reus, Mahón e Ibiza) dispone de su centro de control para llevar a cabo la operación local de cada central. Se debe mencionar que en el caso de las centrales de Cas Tresorer y Son Reus, vuelven a operar por separado, ya que ahora estaba unificada la operación local de las dos centrales en la central de Son Reus.
Así en Baleares se dispone de dos Centros de Control de Generación independientes: el centro de control de Palma, en Sant Joan de Déu, y el centro de control de Marratxí, Esto permite que un incidente en uno de los centros de control no tenga afectación sobre el otro, ya que los dos centros de control funcionan de manera independiente con las mismas condiciones y funcionalidades.
Cabe recordar que los sistemas eléctricos extrapeninsulares presentan una mayor problemática debido a la dificultad para regular áreas aisladas de generación y demanda. Con la tecnología que utiliza Endesa consigue una mejor gestión de los sistemas eléctricos insulares y poder afrontar de manera óptima la gestión específica propia de los sistemas eléctricos aislados.
Asimismo, y debido a que los centros de control constituyen un punto esencial dentro del sistema eléctrico, también se dispone de una serie de medidas de protección orientadas a garantizar su funcionamiento mediante conmutación automática, con más de una fuente eléctrica para conmutarse en caso de que sea necesario; Sistemas de Alimentación Ininterrumpida (SAI), a través de baterías y otros elementos almacenadores de energía, y grupos electrógenos que entran en funcionamiento si el corte de alimentación persiste.
Además de la intensificación de la limpieza y de la higiene de las áreas comunes, se toman medidas de segmentación de los equipos individuales responsables del funcionamiento del sistema (trabajadores por turnos), limitando al máximo sus interacciones tanto entre ellos como con otros diferentes departamentos, además del acceso restringido a estas instalaciones. Esta medida es muy importante ya que permite limitar tanto el riesgo de contagio mutuo como el impacto de una cuarentena, lo que permite, si se elevara el nivel de alerta, no comprometer la disponibilidad operativa de la instalación.
MÁSCARAS, GUANTES, GAFAS Y GEL PARA LOS EMPLEADOS
Además del suministro de máscaras, guantes, gafas, dispensadores de gel desinfectante, etc. a todo el personal, se han compartimentado y dividido todos los departamentos, lo que también afecta a la organización del trabajo, que prevé la suspensión de la mayoría de las actividades de mantenimiento que no sean imprescindibles, la aplicación del teletrabajo y la permanencia del personal de mantenimiento en su casa mientras no sea necesario en el centro de control. En el caso de las centrales, este teletrabajo se ha extendido como aislamiento preventivo y la unidad familiar debe adoptar las medidas más extremas de limitar contactos con el exterior.
Con el fin de reducir al mínimo la indisponibilidad de los grupos de generación, en todas las centrales de Baleares, mientras dure el estado de alarma, se aplazan las revisiones previstas en las unidades de generación. Asimismo, es importante destacar que actualmente están garantizados los medios humanos y materiales para el mantenimiento preventivo y correctivo en las centrales de generación. Todas las centrales disponen de los repuestos y materiales necesarios para hacer frente al mantenimiento preventivo y correctivo menor.
Por otra parte, con la activación del estado de alarma se ha movilizado a la plantilla de la Central Térmica de Alcúdia por si fuera necesario que los grupos 3 y 4 entren en funcionamiento. En este momento, más del 60 por ciento de la plantilla se encuentra en la modalidad de teletrabajo. Toda la plantilla está disponible y localizable por si fuera necesaria su presencia en la central.