Hay que ser muy torpe o muy ingenuo para pedir al presidente de la Liga de Fútbol Profesional que vigile al Almería y la Ponferradina y encima hacerlo público. No es preciso ser abogado para saber que si uno solicita la intervención de cualquier teléfono, móvil o fijo, necesita una orden judicial. Y, sobre todo, no hay ninguna necesidad de enfrentarse a andaluces y maragatos para llamar su atención sobre una situación que ellos podrían interpretar justo a la inversa, puesto que mientras Girona y Córdova defenderán sus propios intereses, el Real Valladolid no solamente afronta un partido para ellos intrascendente sino que no empezó a entrenar hasta el miércoles y su máximo ejecutivo, ya ha anunciado que toda la plantilla termina contrato a excepción de dos jugadores. Estas maniobras revelan meridianamente la torpeza de los gestores mallorquinista y su profundo desconocimiento del “know how” del fútbol profesional.
A la vez, Utz Claassen, aún presidente, sigue desaparecido y ni el dueño del club sabe dónde está ni, por lo visto, le importa. A nosotros, tampoco. Sin embargo la suma de todas estas actuaciones y acciones, algunas de ellas por omisión, certifican cuanto hemos venido anunciando y denunciado desde esta sección de mallorcadiario.com. Alfonso Azuara incide en que “el buen periodismo es la investigación y el reporterismo, pero eso está en recesión. No existe. Cuesta dinero y es conflictivo. Y en el ámbito deportivo, lo que gusta ahora es eldeclaracionismo, las entrevistas que no dicen nada, fichajes....pero abordar lo que ocurre en los clubes....verás que no se toca. La autoestima de los periodistas, desde luego, ha bajado mucho. Nos hacen pis y decimos que llueve. Y luego está ese forofismo a ultranza, que creo es perderse el respecto a sí mismo”. La cita se incluye en el libro “Buenas noches y saludos cordiales” de José María García, a cuya vera fueron a fotografiarse algunos de los aludidos.
No añado puntos, ni comas. Y hasta he leído que Florentino Pérez ha tenido algo que ver en los despidos de Campillo y Segurola, de Marca y Diego Torres, de El País. Así nos va. No muy lejos de aquí hubo quien intentó algo parecido. ¿Lo consiguió?.
