El Sindicato Médico de Baleares se va de Jaume III, abandona la que ha sido su sede de siempre y se instala en un nuevo local en la calle Santiago Rusiñol número 8, un lugar “espectacular” si se compara con el que deja atrás, pero también es un adiós a 34 años de historia, que realmente, viendo las nuevas instalaciones, nadie va a echar de menos. Y es que, se ha pasado de 60 metros cuadrados a un una sede amplia, con despachos y sala de conferencia y formación, vamos, todo un lujo que seguro que los médicos agradecerán porque eran, sin ninguna duda, los que tenían las peores instalaciones sindicales de todos. Claro, que eso es lo que tiene el vivir sólo se las cuotas de sus afiliados.
