El PP está empecinado en que el proyecto de Ley de Símbolos contenga la frase "La utilización o colocación de cualquier símbolo diferente de los descritos en los puntos anteriores tendrá que ser autorizada por la Consellería correspondiente". En la práctica, que sea Educació la que prohíba directamente los lazos cuatribarrados en las fachadas de los colegios. Esta era la redacción del primer borrador realizado por el Govern Bauzá correspondiente al apartado 3 del artículo 4 de la futura ley. No obstante, el Consell Consultiu corrigió este apartado, y en el texto entregado al Parlament fue sustituìdo por la frase: "Cualquier otra utilización de estos bienes para finalidades diferentes a las derivadas del servicio público al cual están afectados requiere la autorización administrativa oportuna de la Conselleria competente en materia de Patrimonio". Ahora el PP quiere imponer la redacción originaria, anterior al dictamen del Consultiu. De esta forma, queda del todo garantizado el control de los centros docentes por parte de la cúpula de Educación. De hecho La ley de Símbolos se puso en marcha pensando exclusivamente en los centros docentes aunque formalmente tenga un ámbito de actuación mucho más amplio. La coalición Més està muy molesta por esta falta de respeto al Consell Consultiu
