El Papa Francisco ha almorzado este jueves en la Casa de Santa Marta con un grupo de 21 refugiados sirios que ahora viven en Roma gracias al proyecto de corredores humanitarios que puso en marcha la Comunidad católica de San Egidio en colaboración con las autoridades italianas.
Se trata de las familias que llegaron a Italia después de la visita del Pontífice al campo de refugiados de Lesbos, en Grecia. El primer grupo de refugiados llegó con el vuelo del Papa el 16 de abril y el segundo, a mediados de junio, según ha informado el nuevo director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Greg Burke.
Tanto los adultos como los niños han tenido la oportunidad de hablar con el Papa sobre el inicio de su vida en Italia. Además, los pequeños han regalado a Francisco algunos de sus dibujos.